Organizadores de París 2024 piden disculpas por supuesta parodia a La Última Cena en la ceremonia inaugural
El comité organizador de la cita olímpica defendió la inauguración del evento y aclaró la polémica escena que desató una ola de críticas por parte de grupos religiosos.
Por Francisco Rosales
La escena se habría hecho en referencia a otro cuadro. CAPTURA.
La ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos París 2024 que se realizó el pasado viernes se llenó de críticas por parte de la audiencia, quien hizo alusión a ciertos segmentos “ofensivos” a lo largo del evento.
Bajo este contexto, grupos religiosos y la Iglesia Católica rechazaron la performance que llevó a cabo la comunidad LGBTIQ+, acusando la realización de una parodia a La Última Cena.
Debido a lo anterior, el comité organizador de los Juegos Olímpicos de París 2024 pidió disculpas públicas por el evento de apertura. Anne Descamps, vocera de la organización explicó que “nunca hubo una intención de faltar el respeto a ningún grupo religioso. La ceremonia de apertura trata de celebrar la tolerancia de la comunidad”.
Por su parte, Thomas Jolly, el director artístico de la ceremonia inaugural de la cita deportiva, aclaró que el polémico segmento no estaba relacionado con La Última Cena, sino que buscaba imitar uno de los festines paganos de los dioses del Olimpo, particularmente de Dionisio. “Nunca encontrarán en mi trabajo la intención de denigrar a nada ni a nadie”, enfatizó el director.
La polémica escena que desencadenó una lluvia de críticas en los Juegos Olímpicos París 2024
La polémica escena fue protagonizada por un grupo de drag queens, una modelo transgénero y un cantante disfrazado como Dionisio, el dios griego del vino.
Bajo este contexto, Thomas Jolly expuso: “Queríamos hablar de diversidad. Diversidad significa estar juntos, queríamos incluirlos a todos, tan simple como eso”.
Pese a ello, la Iglesia Católica en Francia no tomaron la situación de esta forma y consideraron que el segmento “incluyó momentos de burla y mofa del Cristianismo”.
Sin embargo, la escena no habría hecho referencia a ello ni al cuadro de Leonardo Da Vinci, sino que hizo alusión al Festín de los Dioses de Jan Harmensz.
