Libros escolares: millones de textos que compra el Mineduc no se reparten y deben ser destruidos
Entre 2014 y 2017 fueron adquiridos por el Mineduc unos 73,3 millones de textos escolares, totalizando 113 mil millones de pesos. De estos, sólo 69,7 millones de textos fueron efectivamente distribuidos.
Entre 2013 y 2017 fueron dados de baja y destruidos un millón setecientos mil textos escolares, sin que éstos llegaran a las aulas de los escuelas más vulnerables del país.
Así lo revela una investigación de Radio Bío Bío, en el que se detalla que en diciembre de 2013 se gestionó la baja de 251.050 libros y textos escolares. Entre los textos eliminados se encontraban dieciséis mil libros de biología para II Medio de editorial SM, once mil textos de historia para Sexto Básico de Editorial Zig Zag y libros de inglés para Séptimo Básico de Cal y Canto. Otros títulos eliminados correspondieron a las editoriales Santillana, Pearson, Harcourt, Galileo, MN, R&B, Vicens Vives y Norma.
Los textos escolares fueron entregados a empresas dedicadas a la compraventa al por mayor de papel y cartón, pagando ochenta pesos por kilo de libros.
Entre 2014 y 2017 fueron adquiridos por el Mineduc unos 73,3 millones de textos escolares, totalizando 113 mil millones de pesos, unos 175 millones de dólares. De estos, sólo 69,7 millones de textos fueron efectivamente distribuidos. Así, se generó una diferencia de más de tres millones de unidades entre los textos adquiridos y los efectivamente distribuidos.
En 2014 se informó de otros 964.897 textos escolares que debieron salir de las bodegas estatales ubicadas en Quilicura con destino a las recicladoras, la mayor de las destrucciones de libros. En ese momento casi ochenta mil libros de lenguaje y comunicación para Primero Básico de Editorial Santillana fueron eliminados. También fue ordenada la destrucción de otros doscientos mil textos de inglés para diferentes niveles de la editorial Cal y Canto.
Mientras que en 2016 498.833 unidades dadas de baja. Entre los libros desechados figuraron sesenta mil textos escolares de física para III Medio de Editorial Zig Zag, otro número similar de textos de química del sello Cal y Canto y unos cincuenta mil libros de biología para Primero Básico de Santillana.
Al respecto, el Ministerio de Educación aseguró que “los textos escolares que quedan como excedentes, debido a la pérdida de vigencia curricular o porque son licitados nuevamente, en general se ve la posibilidad de que sean donados a instituciones relacionadas y/o se solicita su baja”.