Congreso: parlamentarios deben recibir viáticos aunque no los necesiten
El diputado Andrés Celis (RN) intentó devolver el dinero y la Cámara le depositó $8 millones. "Los viáticos eran un derecho irrenunciable”, le habrían dicho a su par Daniel Verdessi (DC).
Luego de la controversia que se generó tras conocerse los montos que los parlamentarios reciben periódicamente por concepto de viáticos por sus traslados al Congreso, varios de ellos se comprometieron a reintegrar esas platas. Sin embargo, -aseguran- desde la Corporación se habrían negado a recibir las devoluciones argumentando que se trata de un beneficio de carácter “irrenunciable”.
Entre los parlamentarios que pretendían devolver el dinero se cuenta el diputado DC Daniel Verdessi, que vive en Valparaíso y que pese a esto recibió entre marzo y octubre del 2018 $ 5.017.565. El parlamentario aseguró a La Tercera que se comunicó en dos ocasiones con el secretario de la Cámara, Miguel Landeros, y el presidente del Consejo Resolutivo de Asignación Parlamentaria, Andrés Zaldivar, quienes le habrían señalado que “los viáticos eran un derecho irrenunciable”. “Por ahora, tengo apartado ese dinero para ver qué hará con esto en marzo.”, expresó Verdessi.
En situación similar está el diputado Andrés Celis (RN), quien también posee una casa en la V Región, por lo que anunció que devolvería todos los viáticos que ha recibido desde que llegó al Parlamento, en marzo de 2018. Con esta intención, entregó en notaría un vale vista po $8 millones, los cuales nunca llegaron a manos del Congreso, por lo que decidió depositarlos directamente en la cuenta bancaria de la institución.
Frente a esto, el departamento de finanzas del Congreso le hizo llegar a Celis un cheque por los 8 millones, con el argumento de que no podían recibir ese dinero. “Me dijeron que el Consejo Resolutivo todavía no se había reunido y no sabían qué iba a pasar con los viáticos”, dijo el diputado.
Ximena Ossandón (RN), también decidió devolver los viáticos que recibía por ir el día lunes al Congreso de Santiago, ya que la parlamentario tiene domicilio en la capital, sin embargo, la Cámara no aceptó la petición y Ossandón tomó la decisión de donar el dinero. “El cheque iba a morir en una notaría, porque por reglamento no se puede devolver a la Cámara y nadie lo iba a retirar. Entonces, opinamos y llegamos a la conclusión de que era mucho mejor invertir la plata -cerca de $ 1 millón- en algo que fuera importante para alguien o para una institución, y así lo hicimos”, señaló Ossandón.