Ministra de Energía: “Queremos acelerar el proceso de retiro o reconversión programada de las centrales a carbón”
La titular de la cartera, Susana Jiménez, destacó la conformación de una mesa de trabajo en torno a la descarbonización eléctrica y los avances en cuanto a la configuración de un sector energético compatible con las expectativas ambientales y sociales, en el marco de la Cena Anual de las Energías Renovables.
La realización de la próxima COP25 (Conferencia de las partes de las Naciones Unidas para luchar contra el cambio climático) en nuestro país, entre el 2 y 13 de diciembre de este año, ha protagonizado la agenda noticiosa durante los últimos días, especialmente por los problemas que ha tenido la organización para encontrar un recinto que esté a la altura de tal evento, el cual -según palabras de la propia ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt- es el más grande que se abordado “desde el mundial del 62’ ”.
Pero más allá de los temas de logística, ¿cómo se presenta Chile ante el mundo en materia medioambiental? Lo hace habiendo alcanzado una participación cercana al 20% en cuanto a generación eléctrica proveniente de energías renovables, ubicándose en el primer lugar del ranking (Bloomberg) de mercados emergentes atractivos para invertir en energías limpias y tras haber conseguido reducir en un 9,9% sus emisiones. Esto último, según el “Tercer Informe Bienal de Actualización de Chile sobre Cambio Climático” que dio a conocer la ministra Schmidt en diciembre de 2018, en medio de la COP24.
Pese a los esfuerzos, y desde una perspectiva global, aún queda mucho trabajo por hacer, tanto si consideramos, por ejemplo, que el mundo ha sido incapaz de bajar sus emisiones para alcanzar las metas del informe 1.5°C del IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change), cuya apuesta apunta a disminuir éstas en un 45% en los próximos 11 años, para posteriormente lograr un balance neto de cero emisiones en 2050.
Dentro de este contexto, fue que Carlos Finat, director ejecutivo de Acera y en el marco de la versión 2019 de la Cena Anual de dicha asociación, analizó el rol del país con respecto a este desafío global y se preguntó si acaso “¿Chile puede hacer algo para que se alcancen las metas del IPPC?”.
Y la respuesta de Finat fue sin titubeos: “Evidentemente sí. Chile ha logrado lo que nadie ha podido: desarrollar la industria de las ERNC (Energías renovables no convencionales) sin pagar un solo dólar en subsidios y bajando los costos de la energía eléctrica. Incluso, podría decirse que se logró a pesar del subsidio que tienen las centrales que usan combustibles fósiles, debido a la enorme subestimación de sus costos de emisiones, los que además son asumidos en parte por las centrales ERNC. Lo que Chile ha logrado puede inspirar a otros países a seguir una senda similar”.
Adicionalmente, el director ejecutivo de Acera resaltó que “ya se han dado algunos pasos importantes, tal como el acuerdo entre las generadoras propietarias de centrales a carbón y el Ministerio de Energía para no construir más centrales de este tipo y para acordar un plan de retiro o reconversión a tecnologías de bajas emisiones. Y esperamos que se consideren plazos razonablemente cortos que permitan eliminar totalmente la generación a carbón antes del año 2040”.
Por su parte, la ministra de Energía, Susana Jiménez, quien también se hizo presente en la Cena Anual de la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento, afirmó que “queremos acelerar el proceso de retiro o reconversión programada de las centrales a carbón existentes”, y destacó la constitución –en junio de 2018- de la “Mesa de Retiro o Reconversión de Centrales a Carbón” que lidera el Ministerio de Energía y que reúne a diferentes actores en torno al desafío de la descarbonización eléctrica.
Pero la titular de Energía fue por más, considerando que “la descarbonización del sector de energía no se circunscribe únicamente a la dimensión eléctrica. Evidencia de ello es que la electricidad sólo corresponde al 22% de nuestros consumos eléctricos”. Por lo mismo, la ministra declaró que “para tener un real éxito en nuestra estrategia de reducción de emisiones debemos acelerar la modernización de los consumos tradicionales de combustible, como son el transporte y los usos térmicos en procesos industriales y residenciales”.
Siguiendo esta línea, Jiménez hizo énfasis en el papel protagónico que juega le electromovilidad en la reducción de emisiones, y resaltó el compromiso -en el marco de la Ruta Energética- de aumentar en diez veces la cantidad de vehículos eléctricos, con miras a que el transporte público sea un ejemplo a seguir en esta materia.
De igual manera, José Ignacio Escobar, presidente de Acera, destacó la importancia de la electromovilidad en cuanto al desafío de disminuir las emisiones. Sin embargo, el directivo aclaró que “no es un aporte real si seguimos cargando las baterías con sobre un 40% de generación fósil. La electrificación de la demanda sólo tiene sentido en la medida que la matriz de generación sea baja o idealmente de cero emisiones. De lo contrario, sólo estaríamos desplazando estas emisiones desde las zonas urbanas hacia zonas de generación de energía eléctrica fósil”.