OCDE y Banco Mundial destacan a Chile por manejo económico de desastres naturales
Nuestro país junto a México, Colombia y Perú fueron destacados como ejemplo de innovación en el manejo económico que realizan ante las catástrofes.
El Instituto para la Resiliencia ante Desastres (Itrend) informó que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Banco Mundial destacaron la experiencia internacional de varios países en el mundo, entre ellos Chile, para evidenciar cómo han avanzado en sus estrategias para enfrentar las pérdidas económicas que involucran los desastres de origen natural.
Durante la presentación del último reporte sobre resiliencia fiscal ante desastres de origen natural, realizada en París por ambos organismos, Chile junto a México, Colombia y Perú fueron destacados como ejemplo de innovación en el manejo económico que realizan ante las catástrofes.
El director del nuevo Instituto para la Resiliencia ante Desastres (Itrend), Felipe Machado, destacó el reconocimiento de la OCDE y el Banco Mundial, porque coincide con las acciones propuestas en Chile para prevenir los enormes costos sociales y económicos que provocan los desastres de origen natural.
Machado dijo que este informe enfatiza la importancia de que los países cuenten “con una estrategia fiscal diversificada para abordar el riesgo financiero de los desastres naturales”. Esto requiere pensar la articulación entre el rol del Estado y del sector privado a través de los seguros y de los bonos de catástrofe, por ejemplo.
Además, el director recordó que “nuestro país es el miembro de la OCDE con mayor gasto promedio por amenazas naturales extremas. Esto significa un costo para la economía chilena correspondiente al 1,2% del PIB anual en promedio.”.
Agregó que, en la última década, han ocurrido más de 30 desastres de gran magnitud, los que han dejado a más de cuatro millones de damnificados y más de 800 víctimas fatales. Solo el terremoto y tsunami de 2010 produjeron pérdidas de alrededor de 30 mil millones de dólares, lo que corresponde al 18% del PIB.
“Si bien Chile es reconocido mundialmente por su capacidad de recuperarse rápidamente después de la ocurrencia de un desastre, aún es necesario transitar hacia un enfoque de resiliencia y de reducción del riesgo de desastres”, recalcó Felipe Machado.
Según la Comisión para la Resiliencia frente a Desastres de Origen Natural (Creden), la implementación de la estrategia nacional de resiliencia, estimada en US$ 914 millones a 20 años, permitiría al país recuperar 2,3 pesos por cada peso invertido en el plan.
“Para el caso de terremotos, el beneficio-costo es de 2,5 pesos, lo que demuestra la relevancia de aplicar programas para aumentar la resiliencia en países altamente sísmicos como Chile”, añadió el director de Itrend.
Asimismo, Felipe Machado precisó que la inversión anual de llevar a cabo la estrategia, que promedia unos 45,7 millones de dólares, permitiría al país ahorrar hasta 106 millones de dólares al año mediante las menores pérdidas asociadas a los desastres de origen natural.
El presupuesto requerido para la implementación de la estrategia consideró la creación del nuevo Instituto para la Resiliencia ante Desastres, con el propósito de resolver las fallas del sistema de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) para la resiliencia ante eventos extremos.
Actualmente, el Itrend es impulsado por Ingeniería de la Universidad Católica y el Centro de Modelamiento Matemático de la Universidad de Chile, además de ser financiado por Corfo, y mandatado por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública y el Consejo Nacional de Innovación para el Desarrollo (CNID).