Bachelet “conmocionada” por la muerte de militar venezolano tras ser torturado
La ex Mandataria hizo un llamado a las autoridades venezolanas para que "lleven a cabo una investigación rápida, exhaustiva, eficaz, independiente, imparcial y transparente de su muerte.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Huamnos, Michelle Bachelet, dijo hoy que está “conmocionada” por la muerte bajo custodia en Venezuela del capitán de marina retirado Rafael Acosta Arévalo tras ser supuestamente torturado.
En una declaración pública, la ex Mandataria destacó que es imperativo que las autoridades venezolanas lleven a cabo una investigación rápida, exhaustiva, eficaz, independiente, imparcial y transparente de su muerte.
“Estoy conmocionada por la presunta tortura del capitán Acosta Arévalo, y porque el trato al que fue sometido mientras estaba en custodia puede haber sido la causa de su muerte. Recuerdo a las autoridades venezolanas que son responsables de la vida, y de la integridad física y psicológica de todas las personas privadas de libertad”, indicó en el documento
“Urjo a las autoridades a llevar a cabo una profunda investigación, -que incluya una autopsia que siga los estándares internacionales- que sea independiente y transparente. Esto es esencial para arrojar luz no solo sobre lo que ocurrió con él, sino también para facilitar que se lleve ante a la justicia a los responsables de su muerte”, añadió.
Los detenidos
La alta comisionada aplaudió la rápida acción de la Oficina del Fiscal General de Venezuela de abrir una investigación sobre la muerte del capitán Acosta Arévalo, y señaló que dos miembros de la DGCIM (servicio de inteligencia) han sido procesados por asesinato en primer grado.
Ante esto, lamentó que las alegaciones de tortura no hayan sido aparentemente incluidas en los cargos.
“También llamo a las autoridades venezolanas para que permitan a los otros seis militares y ex oficiales de seguridad detenidos junto al capitán Acosta Arévalo recibir visitas de sus abogados y familiares, que se aseguren que sean tratados con humanidad y dignidad, y que eviten que sufran torturas y otras formas de maltrato”, afirmó Bachelet.
“Se deben adoptar urgentemente medidas para prevenir la reincidencia de la tortura y otros malos tratos de personas bajo custodia del Estado”, concluyó.