Nueva tragedia golpea al clan Kennedy: nieta muere de sobredosis

La “maldición” de familia Kennedy no da tregua. Ayer se comunicó que una nieta de Robert F. Kennedy murió producto de una supuesta  sobredosis.

Saoirse Kennedy Hill, de 22 años, era hija de Courtney Kennedy Hill, uno de los once hijos del asesinado candidato presidencial estadounidense y de la activista ambiental y de derechos humanos Ethel Kennedy.

Hasta el momento no se ha conocido la causa específica de su muerte. The New York Times citó a fuentes cercanas a la familia que afirman una posible sobredosis. Y es que según sus propias palabras, la joven batallaba contra la depresión desde su temprana adolescencia: “Mi depresión se afianzó al comienzo de mis años de secundaria y estará conmigo por el resto de mi vida”, escribió en un diario estudiantil en 2016.

Luego que la familia se percatara de lo sucedido, los servicios de emergencia llegaron hasta la residencia Kennedy en Hyannis Port, Massachusetts, y trasladaron a la joven al Hospital de Cape Cod, donde fue declarada muerta.

Posterior a ello, el Clan Kennedy, emitió una declaración donde lamentaron profundamente la partida de la joven: “Nuestros corazones están destrozados por la pérdida de nuestra amada Saoirse. Su vida estaba llena de esperanza, promesa y amor. Se preocupaba profundamente por sus amigos y familiares, especialmente por su madre Courtney, su padre Paul, su madrastra Stephanie y su abuela Ethel”.

Saoirse se había ofrecido como voluntaria para construir escuelas en comunidades indígenas en México y “estaba conmovida por las causas de los derechos humanos y el empoderamiento de las mujeres”, dijo su familia.

En el mismo comunicado, su abuela Ethel, expresó: “El mundo es un poco menos hermoso hoy. Ella iluminó nuestras vidas con su amor, sus carcajadas y su espíritu generoso. La amaremos y la extrañaremos para siempre”.

La “maldición” de familia 

El fallecimiento de la nieta de Robert F. Kennedy se suma a una larga lista de muertes tempranas y tragedias familiares que conforman lo que algunos medios han llamado “la maldición de los Kennedy”.

Primero fue Joseph Patrick Kennedy Jr., quien falleció cuando su avión explotó durante una misión secreta en agosto de 1944.

En 1948, Kathleen Kennedy, la segunda de las hermanas de John Fitzgerald Kennedy, falleció cuando volaba hacia el sur de Francia junto a su pareja, el conde William Wentworth-Fitzwilliam, un militar y aristócrata británico.

El Presidente John Fitzgerald Kennedy fue asesinado en noviembre de 1963 mientras recorría las calles de Dallas, Texas, en una limusina descapotable. Tres investigaciones oficiales concluyeron que Lee Harvey Oswald, un ex marine, fue el asesino.  Tras investigaciones del más alto nivel, un juicio, una ley federal de recopilación de datos y centenares de libros, todavía quedan lagunas sobre las circunstancias que rodearon el atentado.

Edward “Ted” Kennedy, hermano de John F. Kennedy, fue un político estadounidense del Partido Demócrata. El año 1969 tuvo un accidente de automóvil en  Massachusetts, al salirse del puente por el que transitaba, su secretaria  Mary Jo Kopechne, falleció. Ted, conductor del automóvil, se declaró culpable de abandonar el lugar del accidente y fue condenado a dos meses de cárcel.

El 16 de julio de 1999 murieron John Fitzgerald Kennedy, Jr., su esposa y su cuñada al estrellarse el avión en el que viajaban por el océano Atlántico. El reporte final de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE.UU., publicado un año después del suceso, explica que el accidente ocurrió probablemente porque John John no pudo mantener el control del avión mientras se precipitaba al agua en medio de la noche.