Del ‘rehén’ a la demanda: así fue el quiebre definitivo de Jorge Sampaoli con la ANFP
La partida de Sergio Jadue, la aparición de una sociedad en un paraíso fiscal y una compleja negociación por su salida terminaron en un conflicto que el casildense terminó judicializando.
El ex entrenador de la selección chilena, Jorge Sampaoli, decidió llevar a la justicia el conflicto que mantiene con la ANFP, presentando una demanda por daños morales en la que exige una indemnización por 3.300 millones de pesos.
En la acción judicial, que ingresó en mayo pasado al 1° Juzgado Civil de Santiago, tanto el casildense como sus ex colaboradores Sebastián Beccacece y Jorge Desio acusan a la entidad actualmente presidida por Sebastián Moreno de “dañar su honra” por los vínculos con Sergio Jadue y de no cumplir los acuerdos, específicamente en materia de reembolso de impuestos por 1.058 millones de pesos.
La demanda vino a coronar una historia de polémicas y distanciamientos entre el actual DT de Santos con el fútbol chileno, la que comenzó un poco después de que la Roja obtuviera la histórica Copa América de 2015.
La sociedad off shore y el derrumbe de Jadue
El casildense junto con Jadue en 2014. (Foto: Agencia Uno)
Tras la celebración del triunfo de Chile en la Copa América de 2015, el ex adiestrador de la Universidad de Chile recibió los primeros cuestionamientos por su proceder en los temas económicos, especialmente por el trato que mantenía con el entonces presidente del fútbol nacional, Sergio Jadue.
En diciembre de 2015, el semanario The Clinic dio a conocer la verdadera “obsesión” que tenía Sampaoli con el dinero, la que quedó plasmada con el vínculo que selló con las autoridades de la ANFP de la época. El artículo reveló el pago por derecho de imagen que era enviado a Islas Vírgenes Británicas a través de una sociedad llamada Alta Lake Investing Limited. Luego de una unificación para evitar la elusión impositiva, el técnico modificó su relación con la entidad en seis oportunidades.
Un mes antes de que se conociera esta información, Jadue presentó su renuncia a la ANFP para viajar a Miami, cumpliendo un acuerdo con el FBI para colaborar con la investigación del llamado FIFA-Gate. Su partida dejó al descubierto una serie de irregularidades, las que inevitablemente salpicaron al argentino.
En febrero de 2016, cuando ya estaba fuera de la selección, Sampaoli tuvo que declarar como imputado ante el entonces fiscal Carlos Gajardo para explicar los detalles del funcionamiento de su sociedad off shore.
La distancia con Salah y el ‘rehén’
El directorio de la ANFP liderado por Salah. (Foto: Agencia Uno)
Tras la salida de Jadue, la situación de Jorge Sampaoli con la ANFP se complicó al extremo. Durante el interinato de Jaime Baeza se trató de convencer al entrenador de permanecer en el equipo, pero su inquietud ante el posible incumplimiento de los acuerdos anteriores lo fue alejando aún más.
En enero de 2016, el ex futbolista y ex entrenador Arturo Salah asumió la presidencia del fútbol chileno. El dirigente, conocido por ser un defensor de los “procesos” en todos los ámbitos del deporte, tenía la titánica tarea de ordenar las cuentas dejadas por sus antecesores y, al mismo tiempo, convencer al director técnico de quedarse bajo un nuevo contexto económico.
La relación entre Sampaoli y el ex presidente de Blanco y Negro no logró fluidez y tuvo su punto cúlmine con una entrevista dada por el entrenador al ex comentarista de CDF Juan Carlos Villalta donde aseguró sentirse como un “rehén” en la selección chilena.
“En este ambiente ya no quiero trabajar ni vivir en el país. Nunca imaginé que en tan poco tiempo se iba a destruir la imagen de un ídolo que tanto le dio al fútbol chileno. Estoy francamente decepcionado y en estas condiciones no puedo seguir dirigiendo cuando la mente la tengo puesta en otro lugar”, expresó el trasandino.
Con la declaración el argentino explicitó sus ganas de dejar Chile para partir al fútbol español, ganándose también el repudio de parte de la hinchada y de la prensa deportiva.
La historia terminó definitivamente el 19 de enero de 2019, cuando Sampaoli llegó a Quilín para acordar los detalles de su desvinculación junto con Salah.
