No se fueron a la B: las salvadas a la fuerza de los equipos chilenos
Castigos a los rivales, fusiones y decisiones directas de los dirigentes permitieron que elencos como Rangers, Ferrobádminton o Deportes Copiapó no cambiaran de división.
La Universidad de Chile entró de lleno a la pelea por evitar el descenso. Es que el elenco de Hernán Caputto se ubica en el penúltimo lugar de la tabla de posiciones, en una carrera donde solo vale lo que se gane en la cancha, sin considerar su rica historia y masiva hinchada.
Pero las definiciones del fútbol chileno no siempre han sido así, ya que a lo largo de la historia los cambios divisionales han tenido otras definiciones, muy lejanas a lo meramente deportivo.
En algunos casos la popularidad de los cuadros involucrados, las “leyes no escritas” sobre los campeonatos o los castigos a los rivales fueron claves para determinar permanencias forzosas en las divisiones, las que pese a todo contaban con legitimidad con los reglamentos vigentes en cada torneo.
1/Ferrobádminton y la permanencia del ‘fundador’
El campeonato de 1949 dejó a Santiago Badminton en el último lugar del campeonato, descendiendo automáticamente a la División de Honor Amateur (antecesora de la Primera B fundada en 1952). Aquello significaba el descalabro de uno de los equipos que compitieron en el primer torneo de 1933.
Por lo mismo, el elenco aurinegro apeló a la entonces Asociación Central de Fútbol (ACF) para aplicar una regla “no escrita”, la que evitaba el descenso de los cuadros “fundadores” de la liga nacional. Por otro lado estaba Ferroviarios, elenco que había conseguido su ascenso por vía deportiva.
Ante esto, los dirigentes del fútbol nacional decidieron que tanto Badminton como Ferroviarios se fusionaran en un equipo llamado Ferrobádminton. La fusión se realizó a regañadientes de ambos equipos, quienes nunca aceptaron la opción para sobrevivir en la máxima categoría.
Ferrobádminton estuvo apunto de bajar en 1953, pero nuevamente se aplicó la regla del “equipo fundador”. El año 1964, cuando liga llevaba más de tres décadas de funcionamiento, aquella norma pasó al olvido, por lo que el equipo llegó al descenso con todas las de la ley.
2/Thomas Bata salva a Iberia
Thomas Bata de Peñaflor (Foto: Revista Estadio)
En 1953 se registró un hecho que hasta ahora no se ha repetido en el fútbol chileno. Thomas Bata, un elenco de la comuna de Peñaflor, rechazó su ascenso a Primera División debido a la falta de financiamiento.
El equipo que durante este año debía descender era Iberia, pero logró quedarse gracias a la decisión tomada por los metropolitanos.
3/Rangers y su ‘buena plaza’
La temporada 1982 fue una de las peores para Rangers en la Primera División. El equipo piducano había terminado último en la tabla de posiciones, lo que lo enviaba directamente a la entonces Segunda División.
En lo deportivo, el equipo rojinegro tenía todo para irse a los “potreros”, pero había otro aspecto que fue determinante para que la ACF tomara una decisión que cambiaría todo. Es que Talca era considerada una ‘buena plaza’ para el fútbol nacional, ya que lograba altas recaudaciones debido a la asistencia de público a los estadios en sus encuentros como local.
Ante esto, la dirigencia decidió mantener a Rangers, perjudicando directamente a Deportes La Serena, que era el antepenúltimo y que deportivamente no debía descender de manera automática.
De todos modos los talquinos aprovecharon de buena manera su permanencia, ya que en 1983 el equipo alcanzó un gran rendimiento con un plantel que fue considerado como “histórico” en la institución.
4/Palestino y los errores matemáticos en el Maule
Eran las últimas fechas del Torneo de Clausura de 2009 cuando Curicó Unido y Rangers, equipos de la Región del Maule, cometieron errores reglamentarios que terminaron costando muy caro.
Tanto los albirrojos como los rojinegros jugaron partidos con seis futbolistas extranjeros en la cancha, lo que sobrepasó la norma que exigía la presencia máxima de cinco foráneos. Aquello implicaba el descuento automático de tres puntos en la tabla general.
Debido a esto los de Curicó quedaron en una liguilla de promoción (la que perdieron ante San Luis) y los talquinos bajaron automáticamente. El gran beneficiado fue Palestino, que sin este movimiento descendía de manera directa a la Primera B. Los árabes terminaron disputando su permanencia en un encuentro con el inexperto elenco de San Marcos de Arica, donde ganaron mediante los lanzamientos a penales.
5/La inmortalidad de Deportes Copiapó
Deportes Copiapó ante Deportes Melipilla en un partido de 2018. (Foto: Camilo Inostroza/ANFP)
La Primera B también sabe de salvadas forzosas, con un protagonista indiscutido: Deportes Copiapó. Es que el cuadro atacameño estuvo varias veces al borde del precipicio de la Tercera División, pero ocurrieron hechos puntuales que evitaron su partida al amateurismo.
En 2008 fue una complicada temporada para los nortinos en lo deportivo y lo económico, ya que mantenían sueldos impagos. Una resta de puntos decretada por el Tribunal de la ANFP decretaba el descenso inmediato, pero su caso fue revisado y el equipo se quedó, perjudicando a Fernández Vial.
El año siguiente pasó algo parecido, pero en el sentido inverso, ya que un duro castigo aplicado a Deportes Melipilla por cotizaciones de jugadores impagas le permitió la salvación absoluta.
En 2010 también peleó por no caer a Tercera, pero en aquella oportunidad logró evitar el descenso con mérito completamente deportivo al superar a Provincial Osorno.
