Lo que dejaron los incidentes que afectaron a la Casa Central y el Campus San Joaquín de la PUC

Este lunes 4 de noviembre tuvo lugar una nueva jornada de protestas, una que congregó a cientos de manifestantes desde las 17 horas en Plaza Italia, y tras la cual un grupo de encapuchados ingresó a la Casa Central de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) para extraer mobiliario e intentar prenderle fuego, acciones que fueron detenidas por Fuerzas Especiales.

Pero no sólo eso, pues en el Campus San Joaquín de esta casa de estudios se tejía otra historia: personal de Carabineros repelía una marcha con carros lanza agua y bombas lacrimógenas. Una postal para nada común en la PUC.

De hecho, y con respecto al episodio en el Campus San Joaquín, el rector de la PUC, Ignacio Sánchez, criticó “la violencia innecesaria y abusiva que tuvo Carabineros con una protesta, inicialmente pacífica”.

Además, el rector detalló -por medio de un comunicado- que “tenemos tres estudiantes heridos con perdigones, lo que es inaceptable. Hubo muchísimas bombas lacrimógenas tiradas al interior del campus y mucha violencia entre estudiantes y Fuerzas Especiales”.

Y es que, según declaró el rector este martes en el marco de una conferencia de prensa, “por una parte toda la población pedimos el apoyo de Carabineros y Fuerzas Especiales cuando estamos en riesgo por grupos que son vandálicos, con grupos que no respetan nada de la propiedad ajena, pero cuando pedimos esa ayuda también queremos que ese aporte, esa protección, tenga ciertos criterios de proporcionalidad. Creo que ese criterio de proporcionalidad en San Joaquín se pasó y se utilizaron mayores medidas de fuerza de que las que hubiésemos razonablemente esperado”.

Al ser consultado sobre las acciones que tomarán al respecto, Sánchez afirmó que “yo me he comunicado con el jefe de zona y también con el general director, lo hemos hecho públicamente, también hemos proporcionado apoyo jurídico a los estudiantes, tenemos cuatro estudiantes que tuvieron que consultar a servicios de urgencia, gracias a Dios ellos están en buenas condiciones en sus casas. Pero lo que más queremos es que una situación así no se repita”.

Asimismo, el rector detalló que “yo hablé con el general Bassaletti, y a través de él con el general Rozas. Ellos se comprometieron a ver los procedimientos que habían realizado, a ver los videos, etc. Y por supuesto pidieron todas las excusas si es que había habido un exceso de fuerza”. Y también, “a altas horas de la madrugada recibimos la visita de un capitán de Carabineros que quería constatar internamente los daños. Entonces, acá están las dos caras de la institución”, agregó.

Suspensión de clases

Tras estos sucesos, la PUC decidió suspender la actividades académicas para este martes 5 de noviembre. “Hay temas de seguridad con nuestra comunidad universitaria. No podemos arriesgar a nuestros estudiantes, a nuestros profesores, a nuestros funcionarios y profesionales”, señaló a través de un video el rector de la PUC, Ignacio Sánchez.

Adicionalmente, Sánchez hizo un llamado al diálogo y a la paz social: “Nada sacamos con estos vandalismos, nada sacamos con esta violencia que hemos visto particularmente en el día de hoy (lunes 4/11) en los campus de la universidad y también en Santiago y en regiones. Creo que a través de la violencia y la falta de diálogo, la intolerancia de todos los lados, a través de la violación de los derechos de los manifestantes, estamos bloqueando la posibilidad de avanzar hacia un Chile más justo, hacia un Chile más humano, más equitativo, en donde la paz social y la alegría la podamos tener entre todos”.

Por otro lado, y con respecto a cuándo retomarán las actividades, desde plantel anunciaron  que abrirán sus campus este miércoles, jueves y viernes de 9 a 14 horas. Sin embargo, no habrá clases ni evaluaciones, sólo instancias de reflexión.

“Pido comprensión no sólo a la comunidad universitaria, sino que también al país, en el sentido que la información que tenemos para tomar estas decisiones muchas veces es parcial, y todos tenemos que tomar decisiones en zonas de incertidumbre, en donde a lo mejor al día siguiente muchos pueden tener una opinión distinta a la decisión tomada. Pero el tema es que las decisiones hay que tomarlas en el momento y sobre todo poniendo antes que nada seguridad de las personas”, explicó el rector Ignacio Sánchez.