Los escenarios que enfrenta la ANFP para el regreso del fútbol chileno

La incertidumbre es total. La suspensión del “partido piloto” entre Magallanes y Cobreloa dejó en duda el cumplimiento de la reprogramación propuesta por la ANFP para el regreso de las tres divisiones profesionales del fútbol chileno. Ante esto, el fantasma del cierre definitivo del campeonato comenzó a rondar en la sede de Quilín.

Desde un inicio el presidente del organismo, Sebastián Moreno, ha planteado que esa alternativa es inviable, por lo que aún debe armar un puzzle que permita que los campeonatos de Primera División, Primera B y Segunda División Profesional cierren con todas sus definiciones concretadas.

Este jueves, a las 15:00, los presidentes de los clubes se reunirán de manera extraordinaria para resolver el tema de manera definitiva.

No hay partidos en lo inmediato

Aunque la proyección de las próximas semanas ha sido imposible de definir, al menos hay cierto consenso con que los encuentros regulares al menos no pueden volver durante este fin de semana.

Así lo expuso el presidente de O’Higgins y ex timonel de la ANFP, Ricardo Abumohor, quien advirtió que “el fútbol va a tener que respetar los plazos en la medida que las cosas se puedan desarrollar de una manera normal. Yo creo que todo lo forzado es malo. Hay que tener la generosidad para buscar la paz social que Chile necesite”.

En esa misma línea se mostró el secretario del Sifup, Luis Marín, quien eso si exige el cumplimiento de todos los contratos de los futbolistas en el caso que terminen a fines de este año.

“Hemos mantenido esta postura y la vamos a seguir manteniendo. El futbolista nunca ha llamado a no jugar, nunca ha llamado a estar fuera de la actividad porque sabe lo que significa y lo que le puede entregar a mucha gente que rodea al fútbol”, expresó.

¿Qué pasaría con el “Plan Valdivia”?

Las dudas de la ANFP y el regreso del fútbol han estado bajo la sombra de una propuesta entregada por el volante de Colo Colo, Jorge Valdivia, quien de plano solicitó que el torneo se cierre tal cual como está, con la Universidad Católica como campeona y sin descenso.

El problema de la idea del “Mago” son los partidos de postemporada, especialmente los de la Primera B, que disputan una llave entre seis equipos por el segundo ascenso a Primera División. También quedarían en vilo las clasificaciones a la Copa Libertadores y Copa Sudamericana, donde cada punto vale a la hora de definir el puesto al que se asistirá (Chile 1 o Chile 3) debido a la repartición de dinero.

Sin embargo, el ejercicio del cierre definitivo del año 2019 en el fútbol chileno dejaría las cosas así: Universidad Católica sería campeona, Colo Colo iría a la Libertadores como Chile 2 y Palestino lo haría como Chile 3. Unión La Calera, Coquimbo Unido, Huachipato y Audax Italiano se llevarían los boletos a la Sudamericana.

En el descenso -según el “Plan Valdivia”- no tendría variaciones, por lo que Universidad de Concepción y Deportes Iquique permanecerían en Primera. Con los dos ascensos, el 2020 se jugaría con 20 equipos.

En la B, el ascenso directo iría para Santiago Wanderers. Si la liguilla se suprime, el otro ascendido podría ser Deportes La Serena, que por el momento ocupa el segundo puesto de la tabla. El salvado del descenso sería Deportes Valdivia. Con esto el próximo año se jugaría con 17 equipos.

En la Segunda División Profesional, San Marcos de Arica podría ascender directamente al ser líder de la liguilla de ascenso. En la parte baja se salvaría Lautaro de Buin, tomando en cuenta además que Independiente de Cauquenes anunció su retiro de la competencia. Esos cupos se llenarían con Deportes Linares (el ascendido desde Tercera A) y el ganador de la liguilla que disputan Deportes Concepción, Deportes Limache, Trasandino y Provincial Ovalle. En síntesis, el campeonato 2020 quedaría con 12 equipos (o 13 si se incorpora Naval de Talcahuano).