Todos miran al general director

Mario Rozas llegó al máximo cargo de Carabineros el 21 de diciembre de 2018, nombrado por el Presidente Sebastián Piñera como general director en medio de una intensa crisis que afectaba a la institución tras la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca.

En aquella oportunidad, Piñera destacaba a Rozas, quien en esa época se desempeñaba como director de Bienestar de la institución, por su trabajo en experiencia operativa y territorial en distintos puntos de Chile.

A pesar de este respaldo al momento de su nombramiento y su abultado currículum, durante las últimas semanas el rol de Rozas al mando de Carabineros ha sido fuertemente cuestionado, tras la gran cantidad de denuncias por aplicación desmedida de la fuerza y violaciones a los derechos humanos.

De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), hasta el 15 de noviembre se registraron 2.381 personas heridas, de las cuales 886 fueron alcanzadas por perdigones, 45 por balines y 1.021 por golpes, gases y otros.

Pese a que muchos de esos casos son atribuibles a acciones realizadas por personal uniformado, Rozas ha defendido el actuar de los funcionarios y ha asegurado que se ha ajustado a la aplicación del protocolo de la institución.

“Quisiera destacar la entrega de mis carabineros, la vocación de servicio de nuestros carabineros porque han dejado los pies en las calles, patrullando, llevando prevención, llevando control. Muchas acciones se han inhibido, muchas acciones delictuales se han disuadido por la presencia de los carabineros, por lo tanto estamos muy conformes con el trabajo desarrollado”, detalló el general a Cooperativa.

“Nuestra actuación obedece a graves alteraciones del orden público y en ese control la gran mayoría de todos los procedimientos han sido adoptados dentro de la perspectiva legal y reglamentaria”, argumentó en conversación con el mismo medio a finales de octubre.

Abel Acuña

Uno de los últimos casos por los que se ha cuestionado a Mario Rozas es el de Abel Acuña, el joven que murió de un infarto mientras participaba de las manifestaciones.

Sobre el hecho, Rozas declaró que “no es posible asegurar que la operación de control de orden público que se llevó a cabo haya incidido en el lamentable deceso de este joven”.

Lo anterior, pese a que personal del SAMU que atendió al hombre de 29 años en el lugar acusó que su personal recibió disparos de perdigones, agua y bombas lacrimógenas por parte de Fuerzas Especiales de Carabineros, lo que según dijeron, entorpeció las labores que realizaban para intentar salvarle la vida a Acuña.

Por su parte, el alto mando de la institución destacó que cuando se produjo el incidente “fue muy complejo” para los funcionarios realizar sus labores debido a “condiciones adversas”, acusando que personas arrojaban objetos a los policías, hacían uso de lásers y además, había poca luminosidad producto de la destrucción de luminaria.

Incluso, el general director aseguró que se ha constatado el uso de escopetas artesanales por parte de terceras personas en varios lugares donde han ocurrido incidentes.

Gustavo Gatica

Según el INDH, 217 personas han sufrido heridas oculares por disparos de perdigones y balines y bombas lacrimógenas lanzadas por Carabineros.

Entre esos casos está el de Gustavo Gatica, el joven que arriesga perder la visión de sus dos ojos tras recibir el impacto de perdigones.

Casos como el de Gatica obligaron a Rozas a reiterar que los carabineros acotan el uso de las armas disuasivas en las manifestaciones.

Por medio de un comunicado, la institución uniformada señaló que comprenden “la legítima preocupación de la ciudadanía respecto de la aplicación de los protocolos sobre uso de la fuerza, en el control del orden público”.

En ese sentido, destacaron los protocolos de Carabineros fueron actualizados en marzo de este año y que en el caso específico del empleo de las escopetas antidisturbios, señalan que que “estas solo se consideran como recurso de última instancia (…) este mecanismo de defensa se usa desde hace muchos años en Chile y forma parte de los protocolos de diversos países en el mundo”.

“Vamos a efectuar una retroalimentación para los todos aquellos que están usando la escopeta antidisturbios”, argumentó Rozas.

Respecto a esto, el director del INDH, Sergio Micco, señaló que “lo central no es lo que digan los protocolos de Carabineros, sino cómo se aplican”.

“Evidentemente se está reconociendo que algo se estaba haciendo mal”, agregó Micco. Sin embargo, complementó que “los protocolos de Carabineros ya señalaban claramente el uso de las escopetas antidisturbios”, estableciendo que el anuncio no acotó en ningún caso el uso de dicho armamento.

En ese contexto, el instituto recordó que la Sección 2.8 de los Protocolos para el mantenimiento del orden público, publicada en el Diario Oficial, establece que “el empleo de la escopeta antidisturbios deberá ser consecuencia de una aplicación necesaria, legal, proporcional y progresiva de los medios, cuando el efecto de otros elementos tales como agua, humo, gases y otros resulten insuficientes o el nivel de agresividad haga aconsejable su utilización para evitar un mal mayor en donde esté en riesgo la integridad física de los transeúntes, manifestantes o Carabineros”.

“En la práctica, la policía uniformada no acotó su protocolo sino que lo amplió a bienes públicos y privados, y para ello anunció que ‘independientemente de la tramitación de los cambios a los protocolos, esta medida empezará a regir de inmediato, por medio de instrucciones a los respectivos mandos operativos’”, agregaron desde el organismo.

El polémico audio

Hace algunos días, se filtró un audio de Mario Rozas en el que aseguraba que no dará de baja a ningún funcionario cuestionado por el procedimiento policial.

El audio filtrado corresponde a un discurso a un grupo de uniformados durante la noche del martes en el casino de la Escuela de Suboficiales, a quienes les agradeció por la labor cumplida durante el último mes.

“Hay algunas cosas que les quiero decir: tienen todo el apoyo y respaldo de este general director. Cómo lo demuestro: a nadie voy a dar de baja por procedimiento policial. Aunque me obliguen, no lo voy a hacer”, se escucha en el audio de Rozas, entre los aplausos de los presentes en el lugar.

“Son tiempos muy complejos, muy difíciles. Yo para 1973 tenía 5 años, el año anterior, el ’72 estuve acá con mi papá y cuando me dicen lo que pasó, lo que pudo haber pasado, créanme que no tengo idea. Por lo tanto, todo lo que estamos pasando es nuevo”, afirmó.

“Yo siempre les preguntó frente a la acción ‘¿han tenido miedo? Pregúntenme a mí. (Estoy) cagado de miedo, si esto es nuevo para todos”, agregó Mario Rozas.

En esa línea, concluyó que “lo único que puedo decir es que mientras estemos unidos, en la medida que estemos cohesionados como ahora, como siempre, nadie nos va a poder hacer daño”.

Ante la polémica que causó el registro, la institución salió a aclarar que esto “corresponde a una retreta o conversación que sostuvo el general director en la Escuela de Suboficiales con personal que regresaba de madrugada, de su servicio, después de una extensa jornada de restablecer el orden público quebrantado”.

“Las palabras del general director aluden al debido proceso, principio legal que asiste a todos los chilenos y al que se ha apelado en casos de denuncias de eventuales excesos o errores que pudiese haber cometido algún funcionario en el ejercicio de sus labores profesionales”.

Asimismo, insisten en que “Carabineros no ampara la comisión de delitos ni la impunidad. Así ha sido demostrado y expresado en múltiples x por el mando, en cuanto a la necesidad de esperar y respetar que los procesos judiciales y los sumarios administrativos finalicen y establezcan las respectivas certezas, antes de disponer, de acuerdo al mérito de la investigación, eventuales medidas, si corresponden”.

Petición de renuncia y el respaldo del Gobierno

Los diputados de oposición Raúl Soto (PPD) y Jorge Brito (RD) llegaron hasta La Moneda con una carta dirigida al Presidente Sebastián Piñera en la que piden la remoción de Mario Rozas.

“La policía uniformada ha sido ineficaz, tanto para cautelar el ejercicio del derecho de reunión, como para identificar y aislar adecuadamente a quienes cometen actos delictuales. Esto se no se trata de protocolos más o protocolos menos, es una situación límite que pone en duda el aprendizaje de nuestro sistema institucional y su capacidad para promover y proteger los derechos humanos de los habitantes de la República”, señala el documento.

“Frente a la necesidad de dar una señal clara de que el poder civil se encuentra realmente comprometido con la plena vigencia de los derechos humanos en Chile, hacemos presente a Ud. la solicitud concreta de que en el ejercicio de sus atribuciones constitucionales, proceda a la remoción del General Director de Carabineros de Chile, Sr. Mario Rozas Córdova, por su responsabilidad de mando en el actuar desmedido de la fuerza policial a su cargo”, agrega.

En ese contexto, Raúl Soto destacó que “lo que exigimos hoy es que se asuman las responsabilidades políticas y de los altos mandos por el actuar de Carabineros que ha reprimido de forma violenta y excesiva a los manifestantes que mayoritariamente de forma pacífica se han expresado en las calles de nuestro país”.

Mientras que Brito argumentó que “es evidente que han habido órdenes expresas de ir a reprimir, ir a disparar e ir a gasear a un país completo que está pidiendo más democracia”.

“No hay nadie intocable en Chile. Y nosotros vamos a buscar todas las responsabilidades, porque a diferencia de la transición, estos dos políticos no estamos disponibles para negociar los derechos humanos ni la impunidad”, indicó.

La senadora DC, Yasna Provoste también tuvo palabras para Rozas e indicó que “lo que hemos visto particularmente de la acción de Carabineros es una sistemática vulneración no solo a los protocolos, sino aquí ha habido derechamente un engaño”.

“Hoy no queda otro camino más que el General Director dé un paso al costado y realmente podamos tener una institución que logre reconectar con las tareas que hoy el Estado le entrega que es resguardar el orden público”, añadió la legisladora.

Pese a las críticas, el Gobierno se ha mantenido firme en su apoyo al alto mando de Carabineros, asegurando cuenta con toda la confianza del Presidente Sebastián Piñera.

La vocera de Gobierno, Karla Rubilar, indicó que Rozas cuenta con la confianza del Presidente. “Nosotros estamos muy agradecidos del trabajo de la inmensa mayoría de carabineros, que han salido a cuidar a los chilenos. Con la misma fuerza, por supuesto que no se toleran los abusos, los excesos, las salidas de protocolo”, por ello, indicó que “esperamos que se investigue rápidamente” para tener certezas respecto de quienes son los responsables y éstos tengan una sanción.