“Yo no la vi ebria”: la declaración del sujeto acusado de violar a Antonia Barra
Lo expuesto por Barra a sus cercanos fue desmentido por el sujeto acusado del presunto abuso sexual ocurrido el pasado 18 de septiembre.
Siguen saliendo a la luz antecedentes del caso de Antonia Barra, la joven de Temuco que se suicidó tras asegurar que había sido violada durante una celebración de Fiestas Patrias en septiembre pasado.
Hace algunos días se dieron a conocer los mensajes de audio que envió la joven de 20 años a sus amigos, en los que les relataba la agresión sexual que habría sufrido.
Sin embargo, lo expuesto por Barra a sus cercanos fue desmentido por el sujeto acusado de la violación, Martín Pradenas Dürr, de 28 años.
“Como 30 minutos después, a más tardar a las 4 de la mañana, llegamos a la discoteque Sala Murano. Entramos y cada uno se queda con su partner de fiesta (…) Nos fuimos a la parte de la música electrónica que quedaba en el segundo piso en un sector pasado de la barra interior”, señaló el sujeto en su declaración judicial, revelada por Meganoticias.
“Yo había tomado un poco más, en algún momento voy a la barra y veo a Antonia. Ella estaba conversando con un joven al que ubico, no somos amigos… Ahí le mandé un mensaje a Antonia por Instagram”, continuó.
En ese sentido, agregó que “estábamos como afirmados de la barra. Conversamos de todo un poco, pero no recuerdo exactamente de qué, pero sí recuerdo que la invité a hacer un after en la cabaña donde nos estábamos quedando. Ella me dijo que sí, que su amiga ya se había ido y que apañaba. Un poco antes de esto, la fiesta había terminado así que nos dispusimos a irnos. Parece que me tomó el brazo”.
Respecto al estado en el que se encontraba la la joven, Pradenas aseguró que “cuando me encontré con Antonia, ella estaba normal. Yo no la vi ebria, sí estaba prendida como en cualquier discoteque. Yo no la vi tomando, no compartí algún trago con ella, ni tampoco le compré algo. Ella podía conversar perfectamente”.
Posteriormente, el acusado contó que se trasladaron a la cabaña -donde habría ocurrido el presunto ataque- y estuvieron entre 25 a 30 minutos en la pieza con Antonia, donde habrían tenido sexo oral.
“Cuando nos vestimos, ella se puso su ropa, no se puso su polera, sino que mi polerón y se volvió a acostar y se tapó con el cubrecamas. Yo le insistí que fuéramos a compartir con mis amigas y ella nuevamente dijo que no”, sostuvo.
En relación a los mensajes que le envió Antonia, en los que lo acusaba del abuso sexual, Martín Pradenas argumentó que la joven le dijo “que no se acordaba de nada, que se sentía sucia; como que se hizo la desentendida de lo que había pasado entre nosotros. Le hice la aclaración de lo que había pasado; le dije que nos habíamos ido juntos, que ella siempre estuvo de acuerdo con todo lo que pasó. Antonia como que trató de acusarme de violación y yo le volví a aclarar diciéndole que todo lo que hicimos, lo hicimos juntos”, señaló.
“Esa conversación terminó donde ella me dijo que nos olvidáramos de lo que pasó, que no le contáramos a nadie y que si nos veíamos, yo no la saludara. Después me di cuenta que ella me bloqueó de su Instagram. Esos mensajes fueron en el trayecto de Pucón a Temuco”, concluyó el acusado.