El cuestionado paso de Adam Levine y Maroon 5 por la Quinta Vergara
Así, Levine fue cuestionado por su interpretación y poco desplante, una situación que contrastó con la actitud mostrada por sus compañeros de banda.
Maroon 5, liderada por Adam Levine, era el número más importante del Festival de Viña del Mar 2020, por lo que las expectativas respecto a su actuación en la Quinta Vergara eran altas.
Sin embargo, su presentación empezó con polémica dado el retraso con el cual saltaron al escenario, ya que recién hicieron su aparición 25 minutos después de lo presupuestado.
Pero las críticas continuaron durante la presentación de la banda estadounidense, esta vez por la actitud mostrada por el vocalista Adam Levine, quien mostró poco ánimo al momento de interpretar su repertorio.
Así, Levine fue cuestionado por su interpretación y poco desplante, una situación que contrastó con la actitud mostrada por sus compañeros de banda.
De esta manera, no sorprendió que críticos como René Naranjo apuntaran sobre la calidad del show. “Escuchando en vivo a Maroon 5 quedan bien claras las maravillas que hacen los estudios de grabación”, expresó.
Escuchando en vivo a ##marron5 quedan bien claras las maravillas que hacen los estudios de grabación #viña2020
— René Naranjo Sotomayor (@renenaranjo) February 28, 2020
Incluso el diputado Francisco Undurraga, vicepresidente de Evopoli, entregó su propia opinión de lo visto por las pantallas de TVN y Canal 13.
“Me disculpan por la auto referencia pero Alan Levine tiene menos voz y ánimo que yo brazo derecho. Se pasó”, declaró.
Me disculpan por la auto referencia pero Alan Levine tiene menos voz y ánimo que yo brazo derecho. Se pasó.
— Francisco Undurraga (@Panchoundurraga) February 28, 2020
Cabe recordar que Maroon 5 llegó a un acuerdo con la producción para que su show no enfrente ningún tipo de interrupción de los animadores y si se diera el caso de recibir la Gaviota, la entrega del galardón se realice una vez que hayan dejado la Quinta, en camarines.
La intención de Maroon 5 es poder realizar una presentación “normal” y acorde a sus recitales a lo largo del mundo, donde no hay animadores o entrega de premios.