Marcelo Trivelli: “Los militares no dejaron nada en La Moneda, ni papel higiénico”
En 1990, el ex intendente de Santiago asumió como asesor presidencial y, entre sus labores, recibió las llaves de la sede de Gobierno tras la entrega del mando por parte de los militares.
“Son las 3:10 de la mañana y lo que tengo en mis manos son las llaves del Palacio La Moneda“, dice Marelo Trivelli en un video dado a conocer por la Fundación Aylwin. Son imágenes de hace 30 años cuando, un 11 de marzo de 1990, se vivió un histórico cambio de mando: Augusto Pinochet entregaba la banda presidencial a Patricio Aylwin, terminando con 17 años de dictadura e iniciando un nuevo período de democracia.
Camiones se ven fuera de la sede de Gobierno. Es de madrugada y se afinan los últimos detalles para la llegada de la nueva administración. Tramoyas, eléctricos y sonidistas preparaban lo que sería la transmisión del cambio de mando. Cantan el himno nacional. “Hemos terminado de recibir las dependencias presidenciales, entregadas por el jefe de la Casa Militar“, expresa Trivelli en las imágenes.
Han pasado 30 años y quien fuera intendente de Santiago recuerda lo vivido. “Me tocó de las pegas más aburridas, la de recibir administrativamente La Moneda“, cuenta hoy Marcelo Trivelli a EL DÍNAMO.
“No era un tema político, pero resultó súper simbólico”, agrega, recordando detalles de la entrega de la casa de Gobierno por parte de los militares.
En 1990, Marcelo Trivelli, a sus 37 años, asumió como asesor presidencial. “Yo trabajé en la campaña de Patricio Aylwin y, a partir de eso, me habían pedido que participara del gabinete presidencial, lo que hoy se conoce como ‘el segundo piso’, y nos repartimos la pega entre los pocos que éramos”.
Con el traspaso de mando, La Moneda estaba vacía: “No dejaron nada, no había ni azúcar, sal, máquinas de escribir, papel higiénico ni toallas. Con eso te digo todo”, expresa el militante de la DC.
Pese a ello, asegura que los militares se comportaron acorde al momento histórico. “Fue una relación muy fría, profesional, pero de respeto recíproco. Ambos sabíamos lo que estaba en juego. Sí se sentía el dolor, o la tristeza mejor dicho, de dejar La Moneda derrotados“.
Patricio Alwin se impuso con 55,17 % de los votos, muy por sobre del candidato oficialista Hernán Büchi, quien obtuvo un 29,40%.
Respecto a la sensación dentro de La Moneda ese 11 de marzo de 1990, Trivelli recuerda que “había mucha esperanza puesta en lo que venía. Se terminaba una época muy oscura y lo principal que se sentía era una liberación de quienes éramos oposición. Los que estábamos viviendo esto de cerca, aunque fuera como actor de reparto, fue de mucho privilegio“.