Pese a advertencias, autoridades bolivianas suministran dióxido de cloro a pacientes con coronavirus en Sucre
El comité científico que asesora al gobierno alertó sobre los graves daños a la salud que puede causar el consumo de este blanqueador.
La gobernación de Chuquisaca en Sucre, al sur de Bolivia, indicó que pacientes afectados de coronavirus están consumiendo dióxido de cloro a pesar que un comité científico nacional advirtió sobre los daños para la salud.
La irresponsable medida fue adoptada por el director regional de salud, Enrique Leaño, quien señaló que “hay mucha gente que está haciendo el tratamiento en Sucre con una buena efectividad”.
Esto pese a la advertencia oficial del Ministerio de Salud de Bolivia que indica que el dióxido de cloro, un poderoso agente oxidante utilizado como blanqueador y desinfectante, no debe ser usado para tratamientos médicos.
El comité científico que asesora al gobierno alertó que entre los daños que puede causar el consumo de dióxido de cloro están las fallas respiratorias, trastornos sanguíneos, presión arterial baja, falla hepática, anemia, vómitos y diarrea.
En medio de esta polémica en Sucre, el Gobierno de Bolivia desautorizó el uso del dióxido de cloro y el clorito de sodio para tratar a enfermos que padecen coronavirus y advirtió sobre un “fraude con evidentes posibilidades de daño orgánico” si se utiliza de manera inapropiada.
El Ministerio de Salud boliviano señaló en un comunicado a medios locales que estos productos, denominados también “solución mineral milagrosa”, no son un medicamento y carecen de un registro sanitario que avale su “seguridad, calidad y eficacia” para tratar el coronavirus, por lo que su elaboración, importación, venta y uso en Bolivia son ilegales.
“Mientras no existan estudios formales y rigurosos sobre su toxicidad, sus efectos biológicos en el organismo en patologías definidas, su farmacocinética y farmacodinámica, el Ministerio de Salud no autoriza el uso de este producto”, expresaron.