Estados Unidos investiga “sospechosas” inversiones de Javier Mascherano en Uruguay
El futbolista argentino habría traspasado dinero desde una sociedad offshore hacia Portugal y luego a una financiera uruguaya ligada al caso Lava Jato.
El futbolista argentino Javier Mascherano se transformó en el nuevo foco de las investigaciones que vinculan a las figuras del deporte con inversiones en sociedades offshore, las que buscarían evadir el pago de impuestos.
El actual jugador de Estudiantes de La Plata, que cuenta con un importante paso en el FC Barcelona de España, es indagado por la unidad de delitos financieros de Estados Unidos (Fincen, por sus siglas en inglés) debido a sospechosas de la sociedad offshore Alenda Investments Ltd, registrada por Mascherano en las islas Vírgenes Británicas, por una serie de movimientos de fondos que registró a fines de 2015.
Según lo consignado por La Nación, los dineros que el “Jefecito” tenía en su cuenta en el paraíso fiscal fueron trasladados hacia Portugal para luego terminar en las cuentas de la financiera uruguaya Eurodracma, la que está vinculada al caso Lava Jato en Brasil.
El abogado de Mascherano afirmó que dichos dineros fueron usados en “dos inversiones inmobiliarias en Uruguay”, entre ellos “un edificio que hoy tiene alquilado la Embajada de Chile” en Montevideo.
Eurodracma, la institución que intervino en las compras, está ligada al caso de corrupción en Brasil debido al rol de Oscar Algorta, un abogado y corredor de bolsa investigado por diversos movimientos financieros.
Una fuente del mundo financiero uruguayo remarcó que el Banco Bandes, donde Eurodracma recibió el dinero, “fue uno de los pocos que aceptaba a financieras como clientes, ya que, al figurar como titular de la cuenta, no se podía saber de quién era el dinero realmente”.
Mascherano había tenido problemas con el tema de las sociedades offshore, ya que en paralelo con esta investigación el futbolista fue condenado en España por evadir impuestos mediante empresas en Portugal con las que buscó triangular los cobros de Nike por sus derechos de imagen, algo similar a lo que ocurrió con Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, entre otros deportistas.