El lamento de Erika Olivera tras fracaso de proyecto de educación sexual

El fracaso del proyecto de Educación Sexual Integral que fue rechazado y archivado en la Cámara de Diputados, tras no obtener el quórum mínimo de 89 votos a favor que exige nuestra Constitución, caló hondo en varios legisladores de la oposición que vieron como cuatro mociones refundidas en una sola iniciativa no lograron convencer a Chile Vamos.

Sin embargo, fue aún más doloroso para la diputada Erika Olivera (IND-RN) quien, junto a los militantes de Evópoli Sebastián Keitel y Francisco Undurraga, fueron los únicos parlamentarios del oficialismo que aprobaron la medida.

La ex deportista además, según relató a EL DÍNAMO, recordó los pasajes más oscuros de su niñez y preadolescencia, donde fue víctima de abusos sexuales y afirmó que todo hubiese sido muy distinto de contar con un proyecto, como el rechazado en la Cámara Baja, durante su infancia.

Principalmente porque la iniciativa de la oposición planteaba que desde el primer nivel de transición parvulario -kinder- hasta 4º año básico, el foco debía estar en la afectividad, autocuidado, autoconocimiento y prevención del abuso sexual infantil. Luego, desde 5º básico, el enfoque cambiaría para abordar aspectos biológicos y socioculturales, como el embarazo adolescente o las enfermedades de transmisión sexual.

En relación al primer segmento de escolares que buscaba ayudar la legislación de Educación Sexual Integral, Olivera indicó que “en los más chiquititos son súper importantes los conceptos que se desarrollaban”.

“Si lo llevamos al abuso sexual, esto no lo digo yo sino que lo dice la gente experta que ha trabajado con niños abusados, mientras más pequeños los niños aprendan a diferenciar cuáles son los límites, se pueden evitar más los abusos de ese tipo”, agregó Olivera.

-¿Por qué piensa que este tipo de educación puede evitar los abusos?

-Los niños abusados no se dan cuenta de lo que sufren porque no tienen por qué saberlo. Pero si somos capaces de entregar estas herramientas vamos a poder lograr que los niños develen mucho antes el abuso y no esperar que pasen años.

-¿Le consta que así sea?

-Yo puedo hablar de mi experiencia como sobreviviente. Si hubiese tenido acceso a la educación sexual en mi época, desde la afectividad y autocuidado, posiblemente hubiese podido pedir ayuda. Posiblemente me hubiese dado cuenta desde más pequeña que estaba siendo víctima de abusos. También puede haber dicho las cosas que vivía de niña y no, por el contrario, tener que hacerlo cuando ya era preadolescente.

Olivera acusa “razones ideológicos” entre colegas de Chile Vamos

Respecto a la escasa votación al interior de Chile Vamos que logró el proyecto, la diputada Olivera reveló que dos días antes comenzó a conversar con otros parlamentarios del oficialismo, quienes recién entonces le manifestaron que votarían en contra de la iniciativa. El principal argumento, según dijo, fue que el proyecto limitaría la libertad de los padres y apoderados de elegir qué tipo de educación quieren para sus hijos.

Un argumento que Olivera calificó como “insuficiente”, ya que la iniciativa proponía que los padres participaran activamente en el protocolo de la educación sexual en conjunto con el respectivo establecimiento educacional.

La diputada Olivera manifestó que, frente al rechazo a la iniciativa de educación sexual, “ganó la ideología y es lamentable, porque debimos poner la mirada en la infancia”.

-¿Por qué cree que sólo tres personeros de Chile Vamos votaron a favor?

-Porque faltó estudiar más este tema y no quedarse con los eslogan. Hace poco tiempo votamos a favor de la no prescripción de los delitos sexuales en menores y con esto estamos diciendo todo lo contrario. La no prescripción va de la mano con la educación que debe existir desde que los niños son pequeños.

¿Qué quiso decir cuando afirmó que pasó por temas ideológicos?

-Me refiero a que existe pudor y temores en abordar este tipo de temas, lo que no está mal, pero debemos abrirnos a conocer con más profundidad por qué es tan importante trabajarlos. Nunca se dejó fuera a los padres, entonces me dio lata que no se entendiera y que se demonizara el proyecto. Hay que dejar de lado las ideologías, el egoísmo que tenemos los adultos y pensar que estamos legislando por el bien de los niños.

-En la actualidad está peleada con el diputado Sebastián Keitel y él incluso dijo que terminaron con 30 años de amistad. ¿Agradece su voto a favor en el proyecto?

-Cada uno vota bajo sus convicciones, sí se valora que otras personas estén en la misma línea, perteneciendo a un sector opuesto al que presentó el proyecto. También valoro a Francisco Undurraga. Fuimos tres de Chile Vamos y cada uno lo hizo creyendo que este proyecto era fundamental para proteger la infancia.

-¿Tratará de volver a levantar el proyecto de Educación Sexual Integral? Será un gran desafío el de convencer a Chile Vamos para que cambien de opinión.

-Más que Chile Vamos, estoy bajo el alero de RN que es un partido respetuoso de las diferentes visiones. Voy a seguir defendiendo estos temas, pero me voy a comprometer mucho más a que desde mi partido se entienda la importancia y no desde lo ideológico. Además, como estoy por el Apruebo y por la Convención Constitucional, me encantaría y sería muy importante que la infancia quede resguardada en nuestra nueva Constitución ya que es lo más sagrado de la sociedad.