El buque chileno que detectó al submarino ARA San Juan y que el gobierno argentino desestimó
Mauricio Macri nunca habría dado la autorización para indagar la noticia que entregó el AGS-61 Cabo de Hornos mediante un vehículo autónomo ofrecido por la Armada inglesa.
Las declaraciones de un ex alto mando de la armada argentina dan cuenta que tanto la institución como el gobierno trasandino ignoraron el hallazgo del buque chileno Cabo de Hornos sobre el submarino Ara San Juan lo que retrasó la localización de su posición durante casi un año.
El contralmirante Luis Enrique López Mazzeo aseguró que el gobierno del entonces Presidente Mauricio Macri conocía la ubicación específica del navío 20 días después de que se perdiera contacto con la embarcación y que sus 44 tripulantes habían fallecido en su interior.
“Cuando usted vea toda la documentación, se va a dar cuenta de que nosotros, cuando tuve que firmar el mensaje más doloroso en toda mi carrera que fue el cierre del caso SAR (por la búsqueda y rescate) teníamos detectada la posición del submarino y por eso habíamos coordinado con la Marina Británica el 5 de diciembre (de 2017) el pedido de un vehículo autónomo, porque sabíamos que podía estar únicamente en dos cañadones, que era lo que no podíamos verificar con todos los medios internacionales requeridos”, afirmó López Mazzeo ante los jueces, según consigna Infobae.
Según la investigación, la posición del submarino fue indicada por el buque científico de la Armada de Chile, el AGS-61 Cabo de Hornos, que a través de su radar detectó la ubicación del naufragio el 5 de diciembre de 2017. Sin embargo, el anuncio oficial por parte del Gobierno argentino del hallazgo del ARA San Juan fue el 17 de noviembre de 2018, casi un año después de su desaparición.
“En el marco de las incesantes labores y de los múltiples contactos establecidos, realizamos un hallazgo de un objeto a 940 metros de profundidad a través de los ecos del buque. Aún resta que la Armada Argentina, con apoyo del buque ruso Yantar y un robot submarino, precise la naturaleza del objeto detectado, pero de todas formas estamos orgullosos del largo y sacrificado trabajo efectuado para apoyar a un país amigo”, declaró en ese entonces el capitán de navío chileno, César Miranda.
A pesar del hallazgo, el gobierno argentino nunca dio la autorización para indagar la noticia que entregó el AGS-61 Cabo de Hornos mediante un vehículo autónomo ofrecido por la Armada inglesa.
Submarino Ara San Juan con los 44 tripulantes fallecidos. Imagen: @DanielGaldeano7
AGS-61 Cabo de Hornos
El Cabo de Hornos “es una de las plataformas científico-marina más modernas de su tipo en la actualidad”, señala la Armada de Chile en su sitio web.
“Los principales roles del buque son la investigación hidrográfica, oceanográfica y pesquera, contribuyente a desarrollar la comunidad científica nacional”, señaló César Miranda cuando dio a conocer la noticia sobre el descubrimiento.
Tiene 74,1 metros de eslora, 15,6 de manga, 5,8 m de calado, y un tonelaje bruto de 3 068. Asimismo, puede transportar un total de 68 personas y navegar a una velocidad de 14,5 nudos.
El Cabo de Hornos comenzó su construcción en noviembre de 2008, reemplazando al antiguo buque Vidal Gormaz, presente desde comienzos de la década de 1990 y que había quedado obsoleto. Su bautizo de mar estaba agendado para el 27 de febrero de 2010, pero fue arrastrado por el tsunami que siguió al terremoto que esa madrugada azotó a las costas de Talcahuano, quedando varado a 400 metros de su sitio original y con daños importantes.
El 12 de noviembre de ese año fue contratada la empresa radicada en los Países Bajos Mammoet, especializada en salvatajes navales para reponer la nave.
Luego de participar por 15 días en la búsqueda del submarino argentino ARA San Juan, como gesto de colaboración humanitaria, estableció la ubicación del submarino hundido. Sin embargo, el análisis posterior quedó en manos de la Armada Argentina.
Denuncia contra Macri
Ante este nuevo escenario judicial, familiares de los tripulantes del ARA San Juan denunciaron el miércoles recién pasado en la justicia federal al ex Presidente Mauricio Macri y al ex ministro de Defensa Oscar Aguad por el delito de “encubrimiento agravado” en el hundimiento del submarino.
La querella fue presentada por los abogados Valeria Carreras, Lorena Arias y Fernando Burlando en los tribunales de Comodoro Py en Buenos Aires.
“En caso de confirmarse lo que dijo López Mazzeo ante el tribunal estamos frente a un escándalo sin precedentes”, afirmó Carreras a Infobae.
La denuncia fue realizada a pocos días de cumplirse el tercer aniversario del naufragio del buque en el Atlántico Sur, que se recordará el domingo 15 de noviembre.
