Los esfuerzos en todo el mundo por mantener las escuelas abiertas
Mientras en Hong Kong tuvieron que suspender las clases presenciales, en gran parte de Europa están luchando por no volver a cerrar los colegios.
Cuando los casos de COVID-19 en el mundo alcanzaban recién los 2.057, el ministro de la Comisión de Salud de China, Ma Xiaowei, anunció en conferencia de prensa que se suspendían las clases presenciales en colegios y universidades. Tras el anuncio de ese 26 de enero, poco más de un mes después, el 4 de marzo de 2020, el gobierno italiano también decretó el cierre de los establecimientos educacionales de todo el país: el coronavirus se había extendido y ya daba luces de convertirse en el protagonista de este 2020.
Tras imponerse en Europa, el COVID-19 no tardó en propagarse por América, definiéndose el cierre de los colegios en Chile a partir del 16 de marzo, decisión a la que también adhirieron los planteles de educación superior.
De esta manera, y a medida que la pandemia se esparcía por más territorios y alcanzaba cifras exponenciales, gran parte del mundo se vio obligado a pasar de las clases presenciales a una educación a distancia, por más o menos meses, dependiendo de sus respectivas condiciones sanitarias.
Hoy, cuando Europa está sumergida en una segunda ola y en Estados Unidos y Asia se registran importantes rebrotes, el llamado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) apunta a hacer un esfuerzo por mantener las escuelas abiertas, y de esta forma “asegurar la enseñanza para nuestros hijos”, señaló el jueves 19 de noviembre Hans Kluge, director de la OMS para Europa.
Europa
Si bien en Europa aún no se han decretado cierres masivos de escuelas (con excepción de Rumania), lo cierto es que gran parte del viejo continente está enfrascado en una lucha por mantener el mayor tiempo posible los recintos educacionales abiertos, pese a que la segunda ola de contagios está causando estragos.
De hecho, y tras permanecer meses con las clases presenciales suspendidas, la mayoría de las autoridades de Alemania, España, Reino Unido y Francia han sido tajantes en afirmar que volver a cerrar los colegios sería la última de las medidas a tomar y, por lo mismo, aunque se ha optado por aplicar nuevamente ciertas restricciones ante el incremento de los contagios, las escuelas siguen con sus puertas abiertas.
Así lo ha dejado en claro más de una vez la canciller alemana, Angela Merkel, pese a que desde el sindicato de educación alemán GEW afirmaron su preocupación al respecto, tras señalar que “no hay ningún otro sitio en el que tanta gente se junte en espacios cerrados, sin distancia física y en la mayoría de los casos, sin mascarilla”, consigna El País.
De igual forma, y ante el inminente aumento de los casos, algunas escuelas alemanas han reforzado las medidas preventivas, incluyendo -por ejemplo- el uso de mascarillas en la sala de clases en 154 escuelas de Berlín.
Por otro lado, en Italia, uno de los países más afectados por la pandemia, aunque no se han cerrado las escuelas a nivel nacional, sí se ha limitado a un 75% la presencia de los estudiantes, y en el caso de las regiones más golpeadas -Lombardia, Calabria, Piamonte y Valle de Aosta- se suspendieron hace algunas semanas las clases presenciales desde segundo año medio.
En Rumania, se definió el cierre de los colegios por 30 días (hasta el 9 de diciembre) debido al aumento de los casos positivos de COVID-19.
“Tenemos que ser realistas. Se necesitan medidas más y más duras para contener la expansión de la epidemia”, declaró el presidente rumano, Klaus Iohannis.
Asia
Luego de registrar las más altas cifras de casos nuevos desde agosto (superando la barrera de los cien diarios), las autoridades de Hong Kong decretaron el cierre de los colegios. Esto a partir de este miércoles y al menos hasta pasada la Navidad.
La medida se viene a sumar a la suspensión de clases presenciales, anunciada el pasado lunes, para los alumnos de primer a tercer año básico y también de los jardines infantiles.
“De acuerdo a la tendencia y los números que hemos observado hasta ahora, parece que (la segunda ola) es más severa que la última”, enfatizó Chuang Shuk Kwan, jefe de la sección de enfermedades transmisibles del Centro de Protección de la Salud hongkonés.
Mientras que en Japón, las estrategias para un retorno seguro parecen haber dado frutos, pues de un total de más de 12 millones de estudiantes pudieron volver a clases, sólo 242 han dado positivo por COVID-19 tras mantenerse las escuelas abiertas. Además, 137 de ellos se contagiaron en su hogares, es decir, menos de un 5% de los alumnos adquirió el Coronavirus tras asistir a clases presenciales.
Para lograr aquello, en el país asiático se destinó presupuesto adicional con el fin de implementar una serie de medidas, entre ellas contratar más profesores, ya sean docentes retirados o estudiantes universitarios de los últimos años, y así poder dividir a los alumnos en grupos más pequeños; y la asignación de más recursos para las escuelas, con el propósito de que puedan adquirir desinfectantes y equipos de ventilación, etc.
América
Pese a superar los 13 millones de contagios y más de 265 mil fallecidos, en Estados Unidos las escuelas seguirán abiertas. De hecho, en New York, donde hace menos de dos semanas se habían cerrado los colegios públicos, ya se anunció que las escuelas básicas volverán a tener sus aulas abiertas sus puertas a partir del 7 de diciembre.
Además, en el marco de este nuevo período, los alumnos podrán ir al colegio hasta cinco veces a la semana, dando así fin al modelo de clases híbridas -presenciales y online- que se había implementado en la ciudad de New York. En vista de ello, los escolares deberán someterse a pruebas de Covid-19 semanales.
Por otra parte, en Sudamérica, con excepción de Uruguay, el regreso a las aulas en la mayoría de los casos ha sido lento y gradual. Por ejemplo, el 13 de octubre en Argentina y de manera muy limitada, a finales del mismo mes en Colombia, y en Chile en julio de la mano de casos particulares, como Rapa Nui y el Archipiélago de Juan Fernández, aunque ya son más de mil los colegios que han solicitado su reapertura al Ministerio de Educación.