Tasa de no rendición de la PSU 2020 subió un 86% en relación con el año anterior
Un estudio realizado por CEP evaluó el impacto del estallido social en el proceso de ingreso a la educación superior.
A casi un año del accidentado fin de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) y a días del inicio de la Prueba de Transición (PSU), el Centro de Estudios Públicos (CEP) entregó un análisis sobre el impacto del estallido social en el sistema educativo, encontrando un incremento importante en la tasa de no rendición.
El análisis, que se realizó sobre la base de datos del Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (Demre) y del Ministerio de Educación, consideró los problemas que generó el boicot convocado por la Asamblea Coordinadoras de Estudiantes Secundarios (ACES), el que terminó en la cancelación del test de Historia por la filtración de las preguntas.
En lo concreto, el estudio afirmó que incluso luego que se abrieran tres fechas disponibles, la tasa de no rendición de la PSU de Lenguaje y Matemática aumentaron 64% y 86%, respectivamente con relación al año anterior, llegando al 15,7% y 19,2%.
Con las cifras generales, tasa de no rendición de la PSU aumentó en 86% en relación con el año anterior. La probabilidad marginal de no rendir la PSU a comienzos de 2020 fue 9,5 puntos porcentuales mayor que en el año anterior.
Sylvia Eyzaguirre, doctora en filosofía e investigadora de CEP, señaló a El Mercurio que se trata de un aumento “significativo”. “Es decir, un alumno que tuvo que rendir la prueba el año del estallido de la crisis social tuvo un 9,5% más probabilidades que los años anteriores de no rendirla”, señaló.
Aunque los alumnos de 4° medio aparecen como los más afectados, la investigadora afirmó que el efecto de la crisis fue transversal, aunque con un énfasis en los estudiantes de bajos ingresos y de establecimientos municipales, en particular, los de bajo rendimiento académico, de establecimientos técnico-profesionales y humanista-científico de jornada vespertina.