Unesco estimó que dos tercios de un año académico se perdieron por la pandemia
El organismo internacional afirmó que la suspensión de las actividades en los colegios ha impactado al sistema especialmente en América Latina, por lo que pidió que se entreguen ayudas para la reapertura segura.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) entregó su balance sobre el impacto de la pandemia del coronavirus en el sistema educativo mundial, reportando graves problemas especialmente para América Latina, región que ha sido una de las más afectadas con la crisis.
Durante la celebración del Día Internacional de la Educación, la entidad internacional pidió se incremente y mejore la financiación de la educación y llamó la atención sobre la escasa prioridad que se le ha asignado a este sector en los paquetes de estímulo económico para el desarrollo de las actividades en pandemia.
Entre sus conclusiones, Unesco indicó que se estima que la ayuda internacional para la educación va a disminuir en un 12% como consecuencia de la pandemia. Según conclusiones de esta agencia de Naciones Unidas, las consecuencias del COVID-19 también pueden aumentar el déficit de financiación de la educación en un tercio, hasta alcanzar los 200.000 millones de dólares anuales en los países de ingresos bajos y medios, lo que representa cerca del 40% del coste total.
El estudio afirmó que las escuelas han estado cerradas por completo durante una media de 3,5 meses (14 semanas). Esta cifra se eleva a 5,5 meses (22 semanas) –equivalente a dos tercios de un año académico- si se tienen en cuenta los cierres de escuelas en zonas localizadas.
La duración de los cierres varía mucho según la región, desde cinco meses (20 semanas) de cierres completos a nivel nacional de media en los países de América Latina y el Caribe, hasta dos meses y medio (10 semanas) en Europa, y sólo un mes en Oceanía.
Claudia Uribe, directora de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago), señaló que “en el marco de esta pandemia convocamos a todos los actores sociales a movilizar sus voluntades, esfuerzos y recursos para una pronta recuperación del sector educativo, y para que el proyecto educativo que renazca no deje a nadie atrás y tenga como faros a la equidad, la inclusión y el desarrollo sostenible. Para ello, abogamos hoy con sentido de urgencia por un financiamiento reforzado para la educación que permita atender los enormes desafíos que deja la pandemia”.
Para permitir un regreso seguro a la escuela, el organismo internacional ha pedido que los 100 millones de docentes y educadores del mundo tengan prioridad en las campañas de vacunación.