Cómo ayudar a los niños a prevenir el estrés ante el inicio de un nuevo año escolar en medio de la pandemia
Transmitirles a los niños la flexibilidad que caracteriza este retorno a las clases presenciales y que el colegio es un espacio seguro, son algunas de las recomendaciones de la psicóloga de la USS, Daniela Muñoz.
Comenzó un nuevo año escolar y, con ello, los estudiantes retomaron las clases, ya sea bajo el formato presencial, online o bien híbrido, es decir, que combina ambas modalidades. Sea cual sea el sistema de enseñanza elegido, este nuevo período podría resultar estresante para los niños y jóvenes, especialmente si se considera lo complejo que fue el año escolar 2020, donde las clases se desarrollaron mayoritariamente de manera virtual.
De hecho, según algunos especialistas, se prevén nuevamente trastornos mentales ante un nuevo año escolar en medio de la pandemia, y ante lo cual será importante que los padres y familiares aprendan a identificar los síntomas en los niños.
“En niños generalmente las alteraciones se ven a través de sus comportamientos y ritmos biológicos. Como, por ejemplo, cambios en la calidad del sueño, apetito, inquietud psicomotora, conductas agresivas y aumento de la irritabilidad”, detalló la psicóloga y académica de Educación Diferencial de la Universidad San Sebastián (USS), Daniela Muñoz.
Recomendaciones
Con el fin de prevenir el estrés durante este nuevo período de clases, la principal recomendación de la psicóloga de la USS es acompañar el proceso de cada estudiante. Específicamente, la académica señala que se le debe explicar a los niños cómo operará este regreso a clases, enfatizando que el colegio es un espacio seguro y donde se están tomando todas las medidas y protocolos sanitarios necesarios con el fin de protegerlos.
Además, la especialista afirma que sería positivo “incorporar a los niños a la preparación para este retorno, como la compra de útiles y uniforme, además de transmitir seguridad y verbalizaciones positivas respecto de este retorno, como, por ejemplo, que podrá ver a sus amigos y profesores, etc”.
Así, y de acuerdo a la psicóloga de la USS, habría dos puntos importantes a considerar en torno al regreso a las clases presenciales: primero, mantener una actitud positiva, cuidando el vocabulario de los adultos respecto de las aprensiones que ellos mismos puedan tener; y transmitir flexibilidad en el proceso de retorno, considerando que no es rígido ni obligatorio (se trata de un proceso voluntario, gradual y flexible).
Mientras que, en el caso de aquellos niños que seguirán con clases virtuales, los consejos de la especialista pasan principalmente por: que los adultos mantengan una actitud positiva frente a la situación, pues la idea es no transmitir la propia ansiedad que se tienen los adultos a los niños, quienes no cuentan con recursos para resolver esa ansiedad por sí mismos; y en segundo lugar, es fundamental mantener rutinas claras y predecibles, horarios y actividades diferenciadas entre la semana y el fin de semana y, de esta manera, contribuir a disminuir la ansiedad en relación a lo que vendrá, además permite estructurar las actividades para que toda la familia pueda organizarse durante el período que estén realizando sus diferentes tareas desde la casa.