Senado aprueba que padres puedan elegir orden de apellidos de hijos
Los senadores manifestaron que se trata de un "momento histórico" pues la iniciativa apunta a la igualdad parental de los apellidos de los hombres y las mujeres y que los padres puedan escoger libremente el nombre que le darán a sus hijos.
El Senado aprobó el proyecto que permite a los padres cambiar el orden de los apellidos de sus hijos, con lo cual pasará a tercer trámite a la Cámara de Diputados.
La iniciativa, que tuvo su origen en dos mociones presentadas por los senadores Adriana Muñoz (PPD), Iván Moreira (UDI) y Claudio Alvarado (UDI), entre otros, será vista en la Cámara Baja, la que se deberá pronunciar sobre los cambios que le introdujo el Senado.
Cabe recordar que el Ejecutivo presentó un total de 14 indicaciones al proyecto, las que fueron analizadas y perfeccionadas en la Comisión Especial encargada de conocer iniciativas y tramitar asuntos relacionados con la mujer y la igualdad de género.
Fue la presidenta de dicha instancia, senadora Isabel Allende (PS), quien explicó los alcances de las modificaciones aprobadas, entre las que se cuenta la posibilidad de que los adolescentes de entre 14 y 18 años puedan cambiar el orden de sus apellidos por vía judicial; la prohibición de que personas procesadas, formalizadas o condenadas por delitos sexuales puedan hacer ese trámite; o que por vía judicial, se pueda solicitar usar el apellido de un ascendiente, sea una abuela o abuelo.
En esa línea el Ministro de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, precisó algunos de los cambios hechos y valoró el trabajo realizado en la Comisión.
Uno de los puntos que generó más debate fue la norma que permite a una persona solicitar por vía judicial “usar uno u otro apellido de un ascendiente en línea recta hasta el segundo grado”. Dicha disposición contó con 20 votos a favor, 14 en contra y 2 abstenciones.
En la sesión los senadores manifestaron que se trata de un “momento histórico” pues la iniciativa apunta a la igualdad parental de los apellidos de los hombres y las mujeres y que los padres puedan escoger libremente el nombre que le darán a sus hijos.