“Fue difícil e injusto”: Roberto Cox recordó el complicado momento que vivió en Plaza Ñuñoa
El hecho ocurrió el sábado 19 de octubre de 2019, cuando cubría los cacerolazos en ese sector y terminó escondiéndose en un restaurant.
Momentos complicados fue el que atravesó Roberto Cox el sábado 19 de octubre de 2019 mientras cubría las manifestaciones en Plaza Ñuñoa el marco del estallido social que se había iniciado un día antes.
Mientras realizaba su labor en ese sector, un grupo de personas comenzó a apuntar en su contra y la protesta se volcó en su contra, lo que lo obligó a esconderse en el restaurant Las Lanzas.
En una reciente entrevista con el programa Síganme Los Buenos de Canal Vive! con Julio César Rodríguez, el comunicador recordó lo vivido ese día y explicó que en el camino se dio cuenta que habían “mini cacerolazos en todas las esquinas de Santiago, como diez personas en las esquinas caceroleando”.
“Y cuando nos estábamos dirigiendo a Plaza Ñuñoa nos para un grupo de manifestantes en una esquina. Ellos paraban a todos los autos, caceroleaban diez segundos y te dejaban pasar”, continuó, según lo recogido por Glamorama.
En ese momento, Cox iba de copiloto en la camioneta del departamento de prensa cuando uno de los manifestantes lo reconoció. “Saca una llave inglesa y le empieza a pegar a los vidrios del auto. Se echa uno, dos, tres vidrios. Y le pega al auto del lado del conductor, no del lado en que yo estaba”, relató.
En ese momento lograron zafar de esa situación, pero el conductor advirtió que estacionaría el vehículo a unas cinco cuadras de la Plaza Ñuñoa para evitar que se repitiera. Al llegar, continuó Cox, “nos bajamos con el camarógrafo y le digo ‘lleguemos a la plaza con la cámara abajo, porque si llegamos con la cámara arriba va a ser muy prepotente. Lleguemos con cámara abajo y veamos cómo está la onda’. Había cerca de 600 personas, habían cortado el tránsito, pero todo pacífico”.
“Y cuando vi que el ambiente estaba tranquilo, que por lo general eran familias de ahí que habían salido a protestar a la plaza, le digo al camarógrafo ‘ya, sube la cámara y salgamos en vivo’. Y nos pinchan en vivo. Y se me pone atrás un tipo de unos 25 años que se me pone a decir ‘¡sal de acá facho cul… Sal, ándate de acá fascista cul…!’”, contó, y rememoró que la misma persona lo había increpado durante un despacho en Providencia la noche anterior.
El periodista aseguró que en esta segunda oportunidad, el sujeto no andaba solo, sino que con al menos diez personas más. “Empezamos a despachar y se me acerca el mismo personaje. ‘Ya te dije, fascista, sal de acá, no te quiero ver más, te vamos a sacar la chucha’. Y se acerca uno, dos, diez personajes, treinta, cuarenta, que se me empiezan a tirar encima. ‘¡Mentiroso, mentiroso!’. Yo empiezo a retroceder porque se me venían encima”, aseguró.
“Empezamos a retroceder, ‘¡mentiroso, mentiroso! ¡Que se vaya! ¡Andate, ándate!’. Y cuando los teníamos muy cerca, y dije ‘acá puede pasar cualquier cosa’, y teníamos la puerta del restaurante Las Lanzas de Plaza Ñuñoa, agarro al camarógrafo y ‘metámonos acá’”, contó Roberto Cox hasta que lograron refugiarse, lo que no calmó los ánimos porque el mismo grupo comenzó a golpear los vidrios del local de Plaza Ñuñoa, lo que provocó que los garzones le pidieron que se retirara para no salir perjudicados.
Unas meseras del local impidieron esto y se lo llevaron al fondo del restaurant para que se tranquilizara. Cuando el canal se enteró de lo ocurrido, le dijeron que lo sacarían con Carabineros, a lo que Cox se rehusó. Por lo mismo, esperaron a que la situación se calmara para salir sin ser vistos y dirigirse al vehículo que habían estacionado a cinco cuadras de la plaza.
A modo de reflexión, a más de un año de lo ocurrido en Plaza Ñuñoa, Roberto Cox sostuvo que lo ocurido “fue difícil e injusto” por las consecuencias que tuvo. “Estoy seguro, pero seguro, que si hubiesen mandado a cualquier… En ese tiempo era el conductor de Chilevisión Noticias Central con la Maca (Pizarro). Hasta ese entonces yo seguía ahí”.
“Yo te puedo asegurar que, si mandaban a cualquier conductor de noticias, que la gente lo ve en la calle y lo reconoce, a cualquiera, hombre, mujer, lo hubiese pasado exactamente lo mismo”, cerró.