Apoderados consideran que sus hijos han aprendido menos con la educación a distancia
Un informe de la Universidad de Chile analizó el impacto de la pandemia en los estudiantes, detectando además importantes brechas socioeconómicas en las condiciones materiales de la educación remota.
La Universidad de Chile publicó su décimo informe Vida en Pandemia, el que evaluó el impacto del COVID-19 en las familias del país, especialmente en el establecimiento forzado de la educación a distancia debido a las restricciones que rigen desde 2020.
De acuerdo al estudio, que encuestó a 738 personas que viven con niños y niñas de 1° a 4° básico, en un universo de 2.019 entrevistados, un 68% consideró que sus hijos han aprendido menos o mucho menos con la educación a distancia; mientras un 20% sostuvo que han aprendido lo mismo y solo un 12% plantea que han aprendido más o mucho más.
Según los consultados, este deterioro en el aprendizaje sería mayor en estudiantes de 2° y 3° básico, quienes habrían aprendido menos o mucho menos en un 72% y 70%, respectivamente.
El informe, que fue respaldado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por su sigla en inglés), también descubrió importantes brechas en el aspecto socioeconómico de los apoderados y estudiantes en las condiciones en las que puede concretar la educación a distancia.
Mientras un 76% de los niños y niñas en segmentos de mayores ingresos tuvo un computador o tablet para uso individual y un 23% tuvo acceso a un equipo compartido, la disponibilidad individual de estos dispositivos en sectores de menores recursos alcanzó solo a un 45% y un 16% afirmó que no cuenta con computador o tablet.
Estas diferencias también se replicaron de manera muy similar según el tipo de establecimiento educacional. La disponibilidad de computador o tablet individual en escuelas particulares pagadas llega a 74% y a 49% en recintos municipales.
Sobre el espacio disponible para estudio en las casas, un 84% manifestó que niños y niñas disponen de este. Sin embargo, existen diferencias según la escuela a la que asisten los estudiantes y el grupo socioeconómico en el que están.
De acuerdo al reporte, en las escuelas pagadas, 92% tiene espacio, en las subvencionadas 82% y en las estatales 81%. Esta condición material es reportada por el 89% del segmento de mayores recursos y por el 79% del grupo de menores ingresos. Esto se traduce en que uno de cada cinco niños en los sectores más vulnerables no tuvo un espacio para estudiar en su casa durante la pandemia.