Provoste propone endurecer impuestos al diésel y que el Estado se “apropie” de las rentas de la explotación de recursos naturales
El programa de gobierno apuntará a subirle el impuesto al petróleo para automóviles particulares y empresas de transportes. También busca crear una nueva ley de pesca y depender menos de la actividad minera en la economía.
En la misma semana en que comienzan los debates televisivos entre los candidatos presidenciales y las campañas de propaganda, el comando de la postulante del Nuevo Pacto Social, la senadora Yasna Provoste, contempla lanzar su programa de Gobierno. El documento titulado “Bases para la unidad programática de la centroizquierda” tiene 147 páginas y una gráfica similar a la usada por Michelle Bachelet en 2013. Si bien en un comienzo la fecha de presentación estaba pensada para este miércoles, podría lanzarse en un par de días.
El dossier de la candidata incluye una serie de propuestas cuyos contenidos están distribuidos en cinco ejes: el modelo de desarrollo ambiental, protección social, vida en comunidad, impuestos y manejo del Estado; y temas de género e inclusión social.
Quienes han tenido acceso a la última versión del programa señalan que uno de los temas de fondo que aborda es la desigualdad del ingreso e impuestos. Asimismo, desde el comando de la aspirante a La Moneda señalan que “le declara la guerra al diésel, creará Ministerio del Mar con nueva ley de pesca y que endurece impuestos a la explotación de recursos naturales “.
En varios de sus capítulos plantea la necesidad de que el estado deberá recabar mayores ingresos y aborda la importancia de la protección al medioambiente en la actividad económica.
En este contexto, propone varias medidas que impactan en el uso del diésel como combustible. Por ejemplo, desincentivar el uso de diésel, a través de incentivos a recambios tecnológicos, aumento de impuesto específico a vehículos livianos diésel, eliminando exenciones, y eliminar el crédito del impuesto específico para las empresas de transporte de carga, constructoras, e industrias. Junto con ellos, también propone elaborar una regulación que permita la reconversión de vehículos existentes a vehículos eléctricos.
Del mismo modo, formula el fin de la venta de vehículos livianos de combustión interna, imitando a la Comunidad Europea, programas de fomento de taxis y taxis colectivos 100% eléctricos y licitaciones para 100% de buses eléctricos para RM y regiones, apuntando a 100% buses eléctricos al 2035, con reducción de tarifa por sus menores costos operativos.
Control en la explotación de recursos naturales
En su presentación, el programa señala que Chile tiene por largo tiempo una debilidad estructural, que identifica como “bajo nivel de la productividad y su desaceleración en años recientes”. Según indica se deben generar “condiciones para que las empresas sean altamente productivas, lo cual permitirá mejoras en la calidad de vida de las personas, con mejores empleos, salarios más altos y más recursos para que el Estado provea de bienes y servicios públicos”.
La inversión en innovación y el emprendimiento son fundamentales para el desarrollo de nuevas fuentes de crecimiento (..) la innovación permite avanzar hacia una mayor diversificación de la matriz productiva del país, desacoplar el crecimiento económico de la extracción de materias primas y disminuyendo la dependencia económica de la producción minera.
“Permitir que el Estado se apropie de manera relevante de las rentas que genera la explotación de los recursos naturales”, apuntando a empresas mineras, pero sin profundizar. Donde sí ahonda es en los recursos marinos.
Nueva Ley de Pesca
El documento de Yasna Provoste formula la idea de crear un Ministerio del Mar “que promueva la sustentabilidad de la pesca, regulaciones ambientales más importantes para la acuicultura, y la conservación de recursos naturales marinos”.
De modo similar plantea la necesidad de una nueva ley de pesca con proceso abierto de licitación de cuotas a tasas sustentables, promoción de prohibición de pesca en altamar. En este sentido también pretende crear áreas marinas protegidas y una mayor fiscalización de la pesca ilegal tanto de embarcaciones nacionales como extranjeras. “En la lucha contra el calentamiento global, la pesca ilegal y de alta mar; y en la defensa del sistema antártico. En lo inmediato, adherimos al Tratado de Escazú”.