De proyecto de tesis a startup: innovación permite producción sustentable de setas
Sin postular a un fondo en el transcurso de toda su carrera, actualmente pretenden abrir un financiamiento gracias a que las oportunidades de seguir creciendo han sido respaldadas por la fidelización de los consumidores.
Lo que actualmente es una empresa agrícola dedicada a la producción de setas exóticas comestibles, hace años atrás no era más que un proyecto universitario de dos amigos.
Gabriel Muñoz y Aníbal Yáñez, ambos estudiantes de ingeniería desarrollaron un proceso productivo, reutilizando sus residuos madereros para elaborar sustratos donde sembrarán las setas, con la finalidad de generar productos de mayor calidad, y al mismo tiempo ayudando al medio ambiente.
Frutos de Lonquén, productora agrícola basada en la sustentabilidad se dedica al desarrollo de setas comestibles con producciones que en un largo plazo contribuyen a mejorar la calidad ambiental y los recursos básicos de los cuales depende la agricultura.
“Hicimos un estudio de mercado y nos dimos cuenta de que en Chile se consumen muchos champiñones, pero básicamente un solo tipo de champiñón y que en otras partes del mundo la variedad y diversidad de champiñones en el mercado es bastante más amplia por eso decidimos analizar y evaluar el proyecto pensando en la producción de champiñón. Nuestro primer capital inicial era más o menos del orden de los 100 millones de pesos, nos pusimos manos a la obra y juntamos parte del dinero, pero como no nos rendía, comenzamos la empresa con un socio. Este proyecto partió con la construcción de la planta productiva en Calera de Tango”, confesó Gabriel Mñoz, gerente de Frutos de Lonquén.
La tecnología que utiliza Frutos de Lonquén contribuye de gran manera al proceso de sustentabilidad y por sobre todo al proceso de producción, ya que, si bien los insumos son residuos de la agroindustria, cada uno de ellos pasa por procesos distintos de operación para que luego el conjunto sea el sustrato final desde donde nacen nuestros champiñones.
Sin postular a un fondo en el transcurso de toda su carrera, actualmente pretenden abrir un financiamiento gracias a que las oportunidades de seguir creciendo han sido respaldadas por la fidelización de los consumidores. Se pretende que para finales del 2022 esperan crecer por lo menos en un 30% las ventas, además de una ampliación de la planta industrial ubicada en Calera de Tango y una posible apertura de segunda planta.