Un respiro para los cuidadores
El sistema tiene el deber de implementar una completa red de apoyo al cuidador que hasta ahora se ve incipiente. Tengamos presente que nadie está libre de encontrarse en esta dura realidad, por lo que las y los invito a conmemorar al cuidador en su día, reconociendo su loable labor y brindado apoyo desde nuestros respectivos contextos.
Señor director:
Se estima que el 8% de las personas adultas en Chile se encuentran en situación de discapacidad y dependencia, los cuales necesitan del apoyo permanente de una tercera persona para realizar actividades de la vida diaria. La mayoría de las personas que se desempeñan como cuidadoras lo hacen de manera informal, suelen ser mujeres que se dedican a tiempo completo al cuidado de la persona que lo requiere y no comparten esta tarea con nadie más.
Dada la importancia de las y los cuidadores es que el 5 de noviembre se conmemora esta valiosa labor y en este marco es muy importante realizar una concientización de la situación del cuidador, más aún en los casos en que no se comparte la responsabilidad con nadie más, lo que hace que además de la gran sobrecarga que tienen no puedan tomar vacaciones como el resto de las personas. Esta situación puede ser extenuante y tener serias consecuencias para el cuidador, tanto a nivel físico como psicoemocional, lo que también por supuesto afecta a la persona a quien cuida.
En este escenario se ha implementado como estrategia en algunos municipios el “cuidador de respiro”, una persona encargada de relevar en sus labores al cuidador principal, para que pueda reponerse y descansar al menos un día a la semana. Los cuidadores de respiro pueden ser otros miembros de la familia, amistades, vecinos u otras personas de las respectivas comunidades que reciben capacitación, habitualmente al alero de las municipalidades, que permiten un buen estándar de cuidado de la persona en situación de discapacidad, dando un respiro (de ahí el término “cuidador de respiro”) al cuidador principal.
La problemática del cuidador es seria, más aún lo ha sido durante la pandemia del COVID-19 y, por tanto, es fundamental abordarla desde la política pública. La labor de los cuidadores de personas en situación de discapacidad debe ser reconocida, formalizada y pagada. ¿Cuántos cuidadores se ven impedidos de trabajar? Esto merma la situación económica de las familias y agudiza las problemáticas asociadas a una situación de discapacidad que ya es compleja de asimilar/enfrentar.
El sistema tiene el deber de implementar una completa red de apoyo al cuidador que hasta ahora se ve incipiente. Tengamos presente que nadie está libre de encontrarse en esta dura realidad, por lo que las y los invito a conmemorar al cuidador en su día, reconociendo su loable labor y brindado apoyo desde nuestros respectivos contextos.
Yolanda Maldonado,
Directora Fonoaudiología Universidad Andrés Bello