Rusia prohibió la entrada al país al primer ministro británico Boris Johnson
El Kremlin acusó al primer ministro y a un grupo de funcionarios de su gobierno de mantener una postura “hostil” hacia ellos tras la invasión a Ucrania.
Rusia decidió prohibir la entrada al país al primer ministro británico Boris Johnson y a otros altos funcionarios de su gobierno, tras acusarlos de mantener una postura “hostil” hacia Moscú tras la invasión a Ucrania.
Según lo informado por BBC, la lista de autoridades británicas vetadas por el Kremlin también incluye al vice primer ministro Dominic Raab; la ministra del Interior, Priti Patel; el ministro de Economía, Rishi Sunak; secretario de Estado de las Fuerzas Armadas, James Heappey; y a la parlamenteria y ex primera ministra Theresa May.
Los rusos tomaron esta decisión en represalia a las múltiples sanciones económicas aplicadas por Reino Unido. En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que el veto se debe a “la información desenfrenada y la campaña política de Londres destinadas a aislar a Rusia internacionalmente”.
A esto se sumó la reciente visita de Johnson a Kiev, en donde entregó su apoyo al presidente Volodymyr Zelensky.
“En esencia, el liderazgo británico está agravando deliberadamente la situación en torno a Ucrania, alimentando al régimen de Kiev con armas letales y coordinando esfuerzos similares por parte de la OTAN”, añadieron las autoridades rusas.
Tanto Reino Unido como Estados Unidos han optado por sancionar económicamente a Rusia, con la idea de hacerlo retroceder de la invasión iniciada en marzo pasado. Debido a las sanciones Moscú está prácticamente aislada de Occidente.
Durante los últimos días la guerra dio un giro marcado por la destrucción del crucero Moskva, buque insignia de la flota militar rusa, el que terminó hundido en el Mar Negro tras un aparente ataque de misiles ucranianos.
Ante esto, y como una posible represalia, Moscú retomó los bombardeos en las zonas cercanas a Kiev y al oeste ucraniano, poniendo fin a la pausa de las hostilidades que había iniciado tras las negociaciones en Turquía.