Por qué el dólar baja en Uruguay mientras en Chile rompe récords
Si comparado a los últimos siete días, el dólar estadounidense ya marca un incremento del 3,58%. En las últimas jornadas sumó cuatro fechas sucesivas de ganancias.
En la primera quincena de mayo, el embajador de Uruguay en Emirados Árabes Unidos, Álvaro Ceriani Moreira, celebró en sus redes sociales la posibilidad de comprar carne de origen uruguaya en una de las principales cadenas de supermercados del país ubicado en el Golfo Pérsico. Esa oportunidad de consumir productos provenientes esa nación sudamericana no es una realidad solamente en Asia, pero en otras partes del mundo también y la caída del dólar en el país es uno de los principales efectos del éxito del sector.
Durante el primer trimestre de 2022, el crecimiento en volumen físico de las exportaciones fue de 23,5%, mientras el de las importaciones fue del 16,6%. El sector ayudó a impulsar el PIB (Producto Interno Bruto) uruguayo en el mismo período, de acuerdo con el informe de Cuentas Nacionales difundido en junio por el Banco Central de Uruguay.
Manuel Adorni, analista económico argentino, cree que lo que ha sucedido en Uruguay actualmente es que, a diferencia de lo que ocurre en otros países, le juega en favor los precios de los commodities de su valor de exportación. “Por lo tanto, en un país, con un tipo de cambio libre, como es el caso Uruguayo, lo que ocurre básicamente es que con una mayor oferta de dólares, se aplica la ley de la oferta y la demanda. Así la moneda local empieza a ganar al dólar”, explica a EL DÍNAMO.
Este lunes, el dólar estadounidense se pagó al cierre a 41,60 pesos uruguayos en promedio y eso implicó un cambio del 0,25% comparado con el valor de la sesión previa, cuando acabó con 41,50 pesos uruguayos en promedio.
Comparado en los últimos siete días, la divisa ya marca un incremento del 0,90%. En las últimas jornadas sumó cuatro fechas sucesivas de ganancias. Ya la cifra de volatilidad de la última semana fue de 10,21%, la cual es inferior al dato de volatilidad anual (11,41%) y eso indica que últimamente el país sudamericano ha pasado por un mayor período de estabilidad.
Argentina, al borde del descalabro
Mientras Uruguay goza de estabilidad política y económica en un mundo en crisis, al otro lado del Río de la Plata, la situación vivida es completamente distinta.
Después de tres décadas de crisis económicas y recurrentes ciclos inflacionarios, Argentina convive con una inflación interanual cercana al 62% y las proyecciones hacia fin de año señalan para una subida mucho mayor. Además, los argentinos no confían más en el peso como moneda de reserva y optan por el dólar.
Para Adorni, la política monetaria uruguaya de no imprimir billetes de manera descontrolada demarca la diferencia con lo que ocurre en Argentina. “Acá no hay dólares, hay pocos incentivos para exportar y, además, lo que el Estado paga por exportación es poco”, comenta.
Según el analista, una política monetaria seria, como la de países como Uruguay e Brasil, o que han tenido Bancos Centrales independientes del poder político del turno, hace que el valor de las monedas locales se mantengan a lo largo del tiempo. En Brasil, por ejemplo, el real se ha apreciado en los primeros seis meses de este año.
Peso chileno entre los más desvalorados
El día 6 de julio, una noticia sorprendió a los chilenos. Aquel día, la moneda chilena llegó a marcar momentáneamente un récord histórico de 1.000 pesos por dólar, alza registrada nuevamente este martes. Actualmente, el peso chileno es la divisa que más se ha depreciado en 2022 entre las grandes economías latinoamericanas. Pierde solamente para el peso argentino.
Con otros países en el mundo, la situación de Chile también es complicada. De acuerdo con la agencia Bloomberg, la divisa chilena fue la tercera con mayor depreciación en la última semana, luego del rublo ruso y el peso colombiano. El peso chileno sufrió una caída de 3,98% frente a la divisa estadounidense. La pregunta que muchos hacen es: ¿por qué el dólar está subiendo tanto en Chile? Expertos explican que hay tanto razones internas como externas.
Para Jorge Berrios, docente de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, es bastante difícil adelantarse o predecir lo que pueda suceder con el valor de la divisa estadounidense, pues son varias las situaciones o factores que entran en juego. Un ejemplo es la pandemia del COVID-19, que todavía no se ha terminado y está afectando todo el mundo. Europa y Estados Unidos, por ejemplo, tienen actualmente una inflación por sobre el 7% .
Otro factor señalado por Berrios es la guerra en Ucrania, que afecta a Chile de manera indirecta. “Por lo tanto, hay que entender que la incertidumbre en finanzas radica en que el valor del dólar, ante incertidumbre e inestabilidad económica, tiende en todas partes a subir”, afirmó.
Incertidumbre política
Sobre los factores internos, Berrios cree que la incertidumbre económica y política chilena ha aportado para el alza de la divisa americana. “Eso crea una tormenta perfecta”, sostiene.
Para Victor Salas, académico de la Universidad Diego Portales, Estados Unidos tiene alguna responsabilidad sobre lo que ha ocurrido. Según el profesor de economía, en junio el país norteamericano subió la tasa de interés. “Eso hace que se vuelva más atractiva la tasa de interés norteamericana para todos los capitales que andan buscando tasas altas o rendimientos altos. En nuestros países latinoamericanos, lo que ocurre es que los capitales comienzan a irse para Estados Unidos y los financistas van al mercado cambiar moneda, lo que genera más demanda por el dólar. Consecuentemente, las otras monedas deprecian ante esta divisa”, explica a EL DÍNAMO.
Baja en el precio del cobre
Frente al alza del dólar, el presidente chileno Gabriel Boric afirmó que la situación es “tremendamente preocupante”. Y agregó otro factor que puede impulsar la depreciación del peso frente a la divisa estadounidense: la baja del precio del cobre producto de dos factores que son externos a lo nacional.
“Uno, es la perspectivas de recesión en Europa y Estados Unidos, que recién se van a aclarar en la próxima reunión de la Reserva Federal, que todavía tienen un tiempo, y además el proceso que todavía sigue China con el cierre de ciudades que ha bajado la demanda de cobre”, precisó.
Junto a la situación internacional, Boric advirtió que “también hay factores internos y en esto la incertidumbre, sin lugar a dudas, contribuye”, refiriéndose al plebiscito del 4 de septiembre, en el cual los chilenos decidirán si aprueban o rechazan la propuesta de una nueva Constitución elaborada por la Convención Constituyente elegida por voto popular en 2021.