Escasez de recursos marcó la infancia de Eva Gómez: “Nunca tuve ropa comprada”
Para ganar dinero, de adolescente se escapó a escondidas de su papá e iba al bar de enfrente a cantar flamenco a cambio de propinas
En un bar que estaba ubicado frente a su edificio y escondida de su papá, la exanimadora del Festiva de Viña, Eva Gómez, debutó como cantante cuando era una jovencita en su ciudad natal de Sevilla.
Así se lo contó la propia animadora de televisión a Julio César Rodríguez, durante el reciente capítulo de Pero con Respeto, el late de Chilevisión.
La exconductora de El Diario de Eva relató en la ocasión que desde muy joven debió buscar trabajos para genera dinero, puesto que su familia era de escasos recursos.
Reveló que su padre era militar y tenía un salario muy bajo, lo que en la práctica hizo que fuera su madre costurera quien cargara con el peso de la casa.
Luchadora
“Mi mamá es una mujer tremendamente luchadora, trabajadora, que nos sacó a todos adelante. Todos salimos adelante gracias a mi mamá”, le recalcó la exconductora de Manos al Fuego a Julio César Rodríguez.
Contó también que hasta que llegó la adolescencia, “nunca tuve ropa comprada”, porque su mamá le hacía prendas con lo que quedaba de sus trabajos como modista.
Como a los 13 años ella quería comprarse unos jeans que le encantaban, así que por unas monedas empezó a encargarse del aseo de las escaleras del edificio en que vivía, hasta que juntó lo necesario para comprarse el pantalón.
“Éramos una familia de esfuerzo”, valoró Eva Gómez sobre lo que aprendió de la vida en esa etapa.
Música
Pero fue en ese bar frente a su edificio en Sevilla, que descubrió esa pasión por la música que la acompaña hasta hoy, según recordó la intérprete, junto a Croni-K, del tema “Incomprendido”.
“La música es parte de mi vida, se me paran los pelos”, dijo Eva Gómez, tras recordar que, a escondidas de su padre militar, cruzaba cada noche la calle para entonar canciones de flamenco en el bar, sólo a cambio de propinas.
La animadora aseguró que para ella era tan complicado el asunto, que su familia supo del tema solamente después de ser mayor de edad y estar casada.