Anita Alvarado y la cirugía que la salvó de la muerte: “Si estoy viva es porque Dios lo permitió”
La mamá de Angie se recupera en su casa luego de permanecer internada por una severa hemorragia y reveló que dentro de 12 días sabrá el resultado de la biopsia.
Anita Alvarado agradeció al equipo médico que la salvó y a las personas que donaron sangre para ayudarla, tras permanecer internada grave en una clínica debido a una severa hemorragia.
La recordada geisha chilena fue sometida el martes a una delicada cirugía en la que le extirparon el útero, las trompas y un quiste que medía entre 8 a 10 centímetros.
La mamá de Angie Alvarado le contó a LUN que recién dentro de 12 días sabrá el resultado de la biopsia y que permanece en su casa recuperándose de la operación.
“Finalmente, me dejaron los ovarios. Yo le digo a la gente que nunca tengan o se aguanten el dolor, que vayan y se vean”, reveló Anita Alvarado a sus 50 años.
Aseveró que como es creyente, comprendió que “Dios va a hacer conmigo lo que tenga que hacer. Y ahí entendí que no le tengo miedo a la muerte. ¿Cómo vas a querer vivir si no vas a ser activa para tus hijos?”, planteó la mujer que incursionó también como actriz y cantante.
Anita Alvarado decidió que caminará
“Si estoy viva, es porque Dios lo permitió así y me puso un equipo de doctores maravillosos”, manifestó a continuación.
Según aseguró Anita Alvarado, “ya decidí absolutamente que tengo que caminar, no puedo echarme en la cama y definitivamente este fin de semana se lo voy a dedicar a mis hijos”.
Al respecto argumentó que “uno nota que en los más chiquititos hubo un cambio de comportamiento. Es un reclamo y sé que los niños se enojan porque yo siempre estoy con ellos en todos lados”, reveló.
Contó que su hijo menor, de sólo 8 años, se fue de campamento antes de que cayera internada y cuando volvió ella no estaba en la casa. Al hablar por videollamada le preguntó: “¿Estás enojado, tú crees que la mamá no va a llegar más?”.
Y reveló que con los ojos llenos de lágrimas le dijo: “Mírame bien. Nunca, nunca te voy a dejar solo. No te pude ir a buscar, pero voy a llegar a la casa”, recordó emocionada Anita Alvarado.
Por último, la recordada geisha chilena enfatizó que “estoy contenta de que ya salí de esto. Ahora estoy con más fuerza, voy a seguir vendiendo mis frutos secos, voy a seguir siendo mamá y con más energía”.