Presidente Boric recibe pifias en tensa cena anual de Sonami

El presidente Gabriel Boric protagonizó un tenso momento durante su participación en la cena anual de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), la que se realizó durante la noche del martes en el Metropolitan Santiago Convention & Event Center.

El mandatario entregó un discurso tras las palabras del presidente de Sonami, Diego Hernández, quien lanzó duras críticas contra la reforma tributaria y el royalty minero.

“Me hubiese avisado don Diego y vengo con tenida de combate para responder y hubiese preparado otro discurso (…) celebro que esta instancia nos permita intercambiar puntos de vista y sentarnos en la misma mesa”, expresó Boric al inicio de su declaración. 

El jefe de Estado agregó que “le aviso don Diego que he modificado mi discurso mientras usted hablaba para hacerme cargo de algunas cosas. Tengo el mandato de ser el presidente de todos los chilenos, sea cual sea el resultado del domingo”.

Las pifias y Tierra Amarilla

Tras su emplazamiento a Hernández, el presidente afirmó que “decía Don Diego que son contrarios a disminuir las utilidades en períodos de bajo precio y yo le pregunto ¿cuándo han sido partidarios de entregar parte de las utilidades? ¿Cuándo la Sonami ha dicho ahora sí es el momento de avanzar en un royalty y en una mejor distribución de la riqueza?“. 

La intervención del gobernante provocó algunas pifias entre los asistentes, las que se calmaron a medida que el discurso avanzaba.

Luego, Gabriel Boric aludió a la ciudad de Tierra Amarilla, que ha hecho noticia durante las últimas semanas por el socavón gigante que se registró cerca de una faena minera.

“Piensen en Tierra Amarilla, con una población menor a las 18 mil personas, y alrededor de Tierra Amarilla hay dos o tres relaves y 3 socavones, incluyendo el de hace algunas semana. Se nota que se ha extraído riqueza de Tierra Amarilla, pero hay más pobreza que en el resto de Chile”,  señaló.

El presidente recibió otras tibias pifias, las que se contrastaron con un leve aplauso que cerró la intervención.