Más ropa dudosa en la mira: Aduanas se querella contra La Polar por supuestos delitos de contrabando
Un container que llegó de Pakistán a Valparaíso con 18.557 polerones de dudosa procedencia y originalidad (Adidas) será investigado en el marco de una nueva demanda que enfrenta la multitienda.
Antes fue Adidas y Columbia. Luego se conoció la demanda de Under Armour. Posteriormente reaccionaron Sernac y La Polar. La trama de la supuesta venta de ropa falsificada en la multitienda sigue sumando actores luego de que el Servicio Nacional de Aduanas presentara una querella en contra de la empresa del retail por presuntos delitos de contrabando portuario.
De acuerdo a la demanda que presentó esta oficina pública el lunes 28 de noviembre en el Juzgado de Garantía de Valparaíso, el fiscalizador de la Dirección Regional, Abelardo Arévalo, detectó en un container la existencia de mercancía importada ilegalmente que contenía 18.557 polerones con el logo imitador de Adidas, avaluados en 252.969.670 pesos.
Según el documento ingresado en tribunales, estos productos que tenían como destino las bodegas de La Polar llegaron al país el 9 de septiembre tras partir desde el puerto de Karachi en Pakistán y atravesar el canal de Panamá.
“Consta que el imputado ingresó al país, para su comercialización, 18.557 polerones imitativos de la marca Adidas, cuya importación al país se encuentra prohibida”, afirmaron desde el Servicio de Aduanas. “Las mercancías presentadas están en cajas con poca información, las unidades están protegida con bolsas de plástico sin rotulación de la marca en cuestión”, fue el detalle que presentó Arévalo tras su fiscalización.
Los peritajes a la ropa supuestamente falsificada
En el recurso presentado por Aduanas en contra de La Polar, el propio servicio pide que la ropa sea sometida a peritajes criminalísticos para confirmar o rechazar la originalidad en su confección y marca.
Según lo determinado por sus propias labores, Aduanas sostiene que “en la inspección física realizada no existe información concluyente para determinar las mercancías como originales. Por lo tanto se establece que las mercancías fiscalizadas a simple examen corresponden a mercancías falsificadas, siendo internadas sin la autorización de los titulares de los derechos de autor sobre los diseños que imitan, de esta manera, estos productos constituyen copia de obras intelectuales protegidas”.