Un descuido evitó un nuevo “robo del siglo”: todo lo que se sabe del feroz tiroteo en el Aeropuerto de Santiago
Un funcionario de la DGAC y un delincuente con nutrido prontuario murieron en la balacera que dejó el robo frustrado de 32 millones de dólares que trasladó un vuelo LATAM de Miami a Santiago.
Pudo ser otro “robo del siglo”. Eran 32 millones de dólares los que pretendían robar 12 personas armadas que llegaron faltando cinco minutos para las ocho la mañana al Aeropuerto de Santiago con credenciales falsas. A bordo de camionetas Ford F-150, ingresaron mediante el método del alunizaje hasta la misma losa terminal aéreo para intentar quedarse con el dinero que trasladaba un camión de transporte de valores de la empresa Brink’s.
El primer anillo de seguridad fue sorteado por estos delincuentes después de golpear y maniatar a uno de los funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). Concretado ese paso, dos camionetas se aproximaron a las aeronaves y vehículos de carga que se encontraban en el aeropuerto donde otro trabajador de la DGAC intentó frustrar el robo y comenzó el fatal tiroteo con los delincuentes.
Claudio Villar Rodríguez, quien también era voluntario de Bomberos, fue asesinado en el mismo lugar donde uno de los asaltantes cayó abatido. Hubo disparos con armas cortas y largas. También se observaron cascos, botas y chalecos antibalas para intentar parecer trabajadores portuarios.
La víctima fue alertada del ingreso de los delincuentes por uno de sus compañeros que momentos antes había sido amarrado. Sin embargo, el funcionario de la DGAC pudo soltarse por un descuido de quien lo ató y pudo dar aviso. “Lograron traspasar la primera línea, pero no la segunda que es decisiva. Por ahí entraron, pero por ahí se alertó también. Hay que revisar los procedimientos y por supuesto que sí es una autocrítica”, explicó Raúl Jorquera, director de la DGAC.
“Los vigilantes siguieron todos los protocolos de seguridad ante el asalto y, afortunadamente, todos ellos salieron ilesos. Lamentamos profundamente el fallecimiento en el lugar de un funcionario de la DGAC ante el violento asalto con armamento de guerra”, expresaron desde Brink’s, mientras las policías se desplegaban para intentar detener la huida de los responsables del tiroteo en el aeropuerto.
La huida y el prontuario
El suculento monto que pretendían robar los 12 individuos llegó en un vuelo LATAM proveniente de Miami y la balacera se produjo mientras el avión y otras aeronaves se encontraban estacionadas con pasajeros a bordo. La cola de una aeronave de Delta recibió varios impactos de bala.
Al ver limitadas sus opciones para concretar el robo de estos 32 millones de dólares (26 mil millones de pesos), los sujetos subieron a los vehículos para escapar raudos desde el Aeropuerto de Santiago. En la huida prendieron fuego a dos automóviles a modo de barricada para demorar la acción de las policías que los perseguían.
Una de las escenas que marcó la jornada en que se produjo este robo frustrado y tiroteo en el aeropuerto fue la presencia de uno de estos individuos en un pasaje de Pudahuel pidiendo resguardo a un vecino. A pesar de exhibir una metralleta, el sujeto se mostró tranquilo y no actuó frente a este adulto mayor que le negó la entrada a su domicilio mientras un maestro realizaba trabajos en la casa.
Hasta la tarde de este miércoles, dos heridos que llegaron a diferentes centros asistenciales están siendo investigados por su eventual participación en los hechos. En paralelo se confirmó que la segunda víctima es Maximiliano Concha, de 55 años. Este delincuente cuenta con antecedentes por robo con intimidación, receptación de artículos robados y asociación ilícita. Su última detención fue en abril del año pasado.