Los detalles de la millonaria demanda que presentó ex pareja en contra de Bad Bunny
La mujer acusa que Bad Bunny utiliza su voz sin su consentimiento en varias canciones y promociones, por lo que exige un millonario pago.
La demanda no solo va dirigida a Bad Bunny sino que también contra varias corporaciones. INSTAGRAM.
Benito Antonio Martínez Ocasio, conocido artísticamente como Bad Bunny, enfrenta un complicado panorama judicial luego de la demanda que su ex pareja, Carliz de la Cruz, presentó en su contra el pasado 1 de marzo en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan, en Puerto Rico.
La mujer que es licenciada en derecho, acusa al intérprete de “Titi Me Preguntó” exige el pago de 40 millones de dólares por derechos de imagen, derechos morales de autor y daños y perjuicios.
Esto, según consigna el documento, es porque el puertorriqueño utiliza la frase “Bad Bunny baby” en varias de sus canciones sin su permiso.
En el detalle del caso, el año 2015 Bad Bunny junto a Carliz de la Cruz, decidieron que “sería una idea cautivadora” el que incluyera la palabra “baby” al mencionar su nombre en las canciones que interpreta, tal y como lo hace en “Pa Ti” con Bryant Myers.
“Con la intención de que la frase Bad Bunny baby fuese más original todavía, ambos tuvieron la idea que lo mejor es que se grabara con la voz de Carliz, su novia“, consigna la demanda, precisando que ambos fueron pareja desde 2011, previo a que el artista fuera mundialmente conocido.
No llegaron a acuerdo
Previo al lanzamiento del disco Un Verano Sin Ti, en mayo del año pasado, los representantes de Bad Bunny habrían intentado llegar a un acuerdo con De la Cruz, debido a que la llamativa frase la utiliza en la canción “Dos mil 16″.
Por lo mismo, acusa que se utilizó la voz distinguible de Carliz de La Cruz sin su consentimiento tanto en canciones como en discos, promociones, conciertos y plataformas sociales y musicales, televisión y radio.
A raíz de esto, la demandante acusa a Bad Bunny de “una explotación comercial de su voz, de su identidad sin su consentimiento, en todas las facetas del negocio de la música alrededor del mundo”.
La demanda no solo va dirigida contra el artista más escuchado en el mundo, sino que también incluye a Rimas Entertainment, Noah Kamil Assad Byrne, Rimas Classics LLC, entre otras nueve corporaciones.
