Las claves del reciclaje de metales en Chile

Según datos de la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje (ANIR), actualmente en Chile se valoriza un 16,3% del aluminio procedente de envases y embalajes, es decir que, se le da un adecuado tratamiento para fundirlo y reutilizarlo, o bien, para exportarlo al extranjero.

No obstante, el aluminio es solo uno de los metales, ¿qué pasa con los demás? Según indica el experto Alejandro Hernández Toro, desde hace algunos años la industria chilena de reciclaje de metales como el acero, el bronce, el aluminio y el cobre ha crecido notablemente, con empresas que reciclan miles de toneladas mensuales.

Sin embargo, Hernández Toro, comenta que principalmente la actividad que se hace en el país es de recuperación: “En Chile mayoritariamente se recuperan metales, es decir, se reúnen y clasifican por tipo para ser exportados a recicladoras extranjeras. La capacidad para fundir es muy pequeña, por lo que la mejor manera de darle una nueva vida es enviarlo a países como China o EEUU, quienes sí tienen capacidad suficiente para reciclarlos”.

¿Qué es el reciclaje de metales?

El reciclaje de metales es un proceso que consiste en recuperar y transformar los materiales metálicos que se encuentran en los residuos sólidos urbanos, industriales o electrónicos, para darles un nuevo uso o valor.

Sus beneficios son múltiples, principalmente ambientales, económicos y sociales, ya que contribuye a reducir la contaminación, el consumo de energía y recursos naturales, la generación de empleo y la innovación tecnológica.

“Para hacerse una idea, cada vez que reciclamos 100 latas de aluminio, ahorramos la energía suficiente para mantener alumbrada una habitación por dos semanas. El impacto ambiental es gigantesco, algo que ha sido corroborado por entidades como las Naciones Unidas o GreenPeace”, señala Alejandro Hernández Toro.

Etapas de la recuperación de metales en Chile

Para reciclar los metales, se requiere de una serie de etapas que involucran a diferentes actores y procesos. En Chile, se realizan los siguientes procesos:

Recolección: Consiste en la separación y recolección de los residuos metálicos en los puntos limpios, las empresas generadoras o los domicilios particulares. Los encargados de esta labor son los recolectores informales o formales, que reciben una remuneración por el material entregado.

Transporte: Es el traslado de los residuos metálicos desde los lugares de recolección hasta las plantas de reciclaje o acopio. Los responsables de esta tarea son las empresas transportistas o los propios recolectores.

Clasificación: Se basa en la separación y clasificación de los residuos metálicos según su tipo, calidad y pureza. Esta actividad se realiza en las plantas de reciclaje o acopio, donde se utilizan equipos como imanes, separadores ópticos o balanzas. Los encargados de esta labor son los operarios o técnicos especializados.

Compactación: Corresponde al proceso que ocurre cuando ya están separados cada uno de los metales. Grandes maquinarias se encargan de compactar los metales en grandes bloques que son apilados para su posterior traslado a los puertos.

Exportación: Consiste en el traslado de los bloques metálicos a fábricas de otros países, que son las que finalmente fundirán el metal y le darán una nueva vida.

“En Chile se recicla principalmente cobre, aluminio y acero inoxidable, que son los metales más demandados y valorados en el mercado. También se reciclan otros metales no ferrosos como el bronce, el latón, el zinc o el plomo. De estos metales se obtienen productos como lingotes, barras, planchas, tubos o cables”, comenta Hernández Toro.

Desafíos y oportunidades para el reciclaje de metales

Según indica el experto, el reciclaje de metales en Chile tiene varios desafíos y oportunidades. Entre los desafíos, está la falta de educación y conciencia ambiental de la población, que muchas veces no separa ni entrega los residuos metálicos para su reciclaje.

Por otro lado, como ya se ha mencionado, Chile no cuenta con una industria a gran escala que permita revalorizar los metales desechados, a diferencia de lo que ocurre con el plástico, en donde existe una gran cantidad de empresas que se dedican a reciclarlo.

Pero, sin duda el principal desafío que existe en la actualidad lo tienen las empresas, ya que son las que deberán cumplir con una serie de metas impuestas por la Ley REP, que obliga a productores y consumidores industriales de envases a hacerse cargo de la revalorización de los envases metálicos utilizados.

“No debemos olvidarnos de la chatarra electrónica, también incluida en la Ley REP. El reciclaje del e-waste es una solución que permite aprovechar los materiales valiosos que contienen estos residuos, tales como el oro, la plata, el cobre o el platino, y evitar que se liberen sustancias tóxicas como el plomo, el mercurio o el cadmio en el medioambiente”, explica el experto.

Alejandro Hernández Toro, es un experto en reciclaje cuya labor comprende más de 30 años de experiencia reciclando materias primas como el papel, cartón y metales no ferrosos. Actualmente es director comercial de Norte Verde SpA, empresa que recupera más de 10.000 toneladas de residuos metálicos al año.