Lo que se sabe del caso de la chilena asesinada en Estados Unidos
Hay un hombre de 49 años detenido por el caso, mientras que la familia de la víctima admitió que no ha podido repatriar sus restos debido a los altos costos.
Natalia Manríquez Sepúlveda, una mujer chilena de 35 años y madre de un niño de 13, fue asesinada en Estados Unidos el pasado 7 de septiembre, y su caso recién se dio a conocer hace algunos días.
El crimen de la trabajadora ocurrió en el Hotel Super 8, ubicado en la ciudad de Council Bluffs, en el estado de Iowa, donde la mujer se desempeñaba como mucama.
Fue en horas de la madrugada del pasado 7 de septiembre cuando empleados descubrieron el cuerpo sin vida de la chilena en una de las habitaciones.
Las cámaras de seguridad revelaron que un hombre salió desde la pieza en que se encontró el cadáver, lo que ocurrió horas antes.
El sujeto fue identificado como Jesse Smith, un estadounidense de 49 años, y que figuraba como el segundo agresor sexual más buscado por diversos delitos sexuales.
Una semana más tarde la policía estadounidense lo detuvo y actualmente se encuentra recluido en la cárcel de Pittawattamie, como el principal sospechoso del caso de la chilena asesinada en Estados Unidos.
Hasta el momento, se desconoce la causa de muerte de Manríquez, pero trabajadores del hotel donde se desempeñaba apuntan a un ataque cardiaco.
Familia aún no la puede repatriar
Más allá del dolor por el asesinato, la familia de Natalia Manríquez admitió que no ha podido repatriar sus restos debido a los altos costos.
“Los montos son muy elevados, sólo para la cremación son 7.500 dólares (unos 6,5 millones de pesos)“, contó Angélica, hermana de la mucama chilena asesinada, a LUN.
“Nos dieron opciones para repatriar su cuerpo, pero nos dijeron que los gastos corrían por cuenta de la familia. No entiendo quién se hace cargo de este tipo de situaciones”, planteó la mujer.
Por otra parte ,la madre de la víctima, Laura Sepúlveda, reveló que previo a su muerte, su hija “comentaba todo lo que pasaba. Incluso ya me había dicho mamita, donde trabajo hay un hombre que me anda puro acosando. Me dice que soy bonita, puras cosas así y otras cosas más“.
“Yo le dije que tuviera cuidado y que le advirtiera a la señora del hotel, que no se quedara callada. Y me dijo: Sí, mamita. Le voy a decir. Eso fue de lo último que conversamos”, contó.