Lo nunca visto: dos autogoles en seis minutos
Hay goles que muchas veces tienen que ver más con la suerte que con otra cosa. Así mismo, y para que el universo mantenga su equilibrio (?), hay autogoles que tienen mucho de mala suerte.
Pero los que cometió Goeber, defensor de Cabofriense, están bastante lejos de la mala fortuna. Primero, porque es inexplicable lo que quería hacer. Y segundo, ¡porque fueron dos en seis minutos!
Hay goles que muchas veces tienen que ver más con la suerte que con otra cosa. Así mismo, y para que el universo mantenga su equilibrio (?), hay autogoles que tienen mucho de mala suerte.
Pero los que cometió Goeber, defensor de Cabofriense, están bastante lejos de la mala fortuna. Primero, porque es inexplicable lo que quería hacer. Y segundo, ¡porque fueron dos en seis minutos!
Vamos viendo. Viene un centro desde la derecha de Botafogo, el afortunado rival. Es cierto que en el área estaba el “Loco” Abreu, que es un jugador de cuidado, pero no tanto como para meter el ridículo cabezazo que metió Goeber.
Y en el segundo gol tampoco es muy fácil adivinar cuál era la idea. El centro no lo esperaba ningún jugador rival, el arquero podría haber controlado sin problemas e incluso la pelota iba claramente hacia afuera. Pero no. Goeber dijo otra cosa.
Después de estos dos papelones, el desafortunado goleador, que además es el capitán del equipo, fue reemplazado en el entretiempo. Vean el video.