VIDEOS – La serie que parecía irrealizable: los retos y el realismo mágico detrás de Cien Años de Soledad de Netflix
García Márquez se negó por décadas a aceptar una adaptación de su obra, convencido de que su realismo mágico no podría ser transmitido adecuadamente en pantalla.
La tan esperada adaptación de Cien Años de Soledad, la emblemática novela de Gabriel García Márquez, finalmente tuvo su estreno en Netflix.
Desde el jueves 11 de diciembre, la serie está disponible en la plataforma, marcando el debut de un proyecto que, durante años, parecía irrealizable.
Esta producción no solo ha logrado revivir el mágico pueblo de Macondo, sino que también ha enfrentado uno de los mayores desafíos de la industria cinematográfica: llevar a la pantalla una de las obras más aplaudidas de la literatura hispanoamericana.
Los retos detrás de Cien Años de Soledad de Netflix
Durante décadas, el propio García Márquez se negó a aceptar una adaptación de su obra, convencido de que el realismo mágico de Cien Años de Soledad no podría ser transmitido adecuadamente en pantalla.
Según reveló New York Times, Rodrigo García, hijo del fallecido escritor colombiano, expuso que su padre “no quería que Hollywood hiciera una película de su libro, porque no podía imaginarse a actores que hablaran en inglés interpretando a los Buendía“.
Además, confesó que el autor “tampoco veía la historia épica comprimida en dos horas ni en tres, ni en cuatro”.
Sin embargo, tras la aprobación de la familia, la novela ha cobrado vida en una serie divida en dos partes de ocho episodios cada una producida por Netflix, con un equipo creativo de talla internacional. Una adaptación que ha logrado mantener el espíritu original de la obra, al contar con actores colombianos y respetar la esencia de Macondo.
Realismo mágico
En la adaptación de Cien Años de Soledad, Netflix presenta el realismo mágico de Gabriel García Márquez como algo natural y sutil. A través de efectos visuales, la serie logra mostrar lo sobrenatural de una manera que no resulta exagerado ni fantasioso.
En este mundo, los habitantes de Macondo reaccionan con asombro ante ciertos elementos extraordinarios, como el hielo, algo completamente nuevo para ellos. Sin embargo, otros eventos mucho más sobrenaturales, como el nacimiento de un niño con cola de cerdo o la aparición de un fantasma, no provocan sorpresa ni son cuestionados.
Por ejemplo, en una escena, una niña flota serenamente junto a una canasta, y los personajes reaccionan con calma, sin asombro, como si fuera algo completamente normal.
Otro ejemplo es la escena en la que Úrsula se entera de la muerte de uno de sus hijos a través de un hilo de sangre que recorre la ciudad. Un mágico suceso que se introduce de manera cotidiana en la historia.