Piñera cierra conmemoración del 27F en medio de protestas

En medio de manifestaciones, el Presidente Sebastián Piñera encabezó este domingo el acto de Unidad Nacional en Constitución, frente a Isla Orrego, para conmemorar el terremoto y tsunami del 27 de febrero.

 

Un grupo de personas que portaba banderas y globos negros interrumpió en pleno discurso al mandatario, quien se comprometió a escuchar sus demandas.

 

En la oportunidad, Piñera recordó a las víctimas de la tragedia que “asoló a nuestro país, no solamente en la regiones directamente afectadas, sino que nos golpeó a todos y cada uno de los chilenos y chilenas”, dijo.

 

En la ceremonia también se izó una nueva bandera chilena, en reemplazo de la deteriorada, que se convirtió en símbolo de la tragedia.

 

Las actividades oficiales del Ejecutivo se han realizado en paralelo a decenas de actos a lo largo del país. Cerca de un centenar de personas se manifestó hoy en el bandejón central de la Alameda, frente al Palacio de La Moneda, exigiendo mayor apoyo en el proceso de reconstrucción.

 

En tanto, los vecinos del Edificio Central Park de Santiago hicieron un acto público, reclamando por la falta de soluciones a un año del terremoto. En la oportunidad estuvo el diputado PPD, Felipe Harboe, quien apuntó directamente a La Moneda, acusándola de haber dejado en la total indefensión a los afectados.

 

Asimismo, vecinos de los sectores de Las Salinas, Santa Clara, Villa Mar, Santa Marta y Cruz del Sur en Talcahuano, realizaron durante la madrugada de este domingo una velatón a orillas del canal Ifarle, zonas que fue fuertemente destruida por el tsunami.

 

En la oportunidad los habitantes del lugar recordaron a sus familiares, vecinos y amigos fallecidos la fatídica madrugada vivida hace un año, con velas encendidas. Cuando se cumplieron las 03:34 horas, los vecinos realizaron un minuto de silencio en honor a las víctimas fatales.

 

También se hizo una velatón fuera del edificio Alto Río de Concepción, el que resultó completamente destruido. Cerca de 50 personas, entre los cuales se encontraban vecinos, amigos, y gente que deseaba solidarizar con el dolor de los propietarios del edificio, se reunieron en las inmediaciones del recinto para recordar a las personas que fallecieron cuando el inmueble se desplomó