El premiado documental del chileno Patricio Guzmán se estrena en EE.UU.
El cineasta Patricio Guzmán, cuyo último trabajo, el premiado documental "Nostalgia de la Luz", se estrena hoy en Estados Unidos, opina que refrescar la memoria de la gente es positivo para la salud mental de un país.
El
cineasta Patricio Guzmán, cuyo último trabajo, el premiado
documental “Nostalgia de la Luz”, se estrena hoy en Estados Unidos,
opina que refrescar la memoria de la gente es positivo para la salud
mental de un país.
“La memoria no es una moda, es una
adquisición que ha hecho la cultura contemporánea. Mientras más la
trabajes, mejor salud mental tienes. Cuando un país trabaja la memoria,
se vuelve más creativo. Cuando no tiene memoria, se produce un silencio,
hay una especie de apatía”, afirmó Guzmán en una entrevista con Efe.
Guzmán, radicado en Francia, se encuentra en Nueva York con motivo
del estreno de su último trabajo, que fue distinguido en los festivales
de Cannes, Abu Dhabi y Biarritz, y también en los Premios del Cine
Europeo, en 2010.
Después de exhibirse a partir de hoy en el
Centro IFC del popular Village neoyorquino, “Nostalgia de la luz” se
verá en las ciudades de Chicago, Los Ángeles y San Francisco.
El documental, en el que se entreteje la búsqueda de la explicación del
origen de la vida con la búsqueda de los restos de desaparecidos bajo la
dictadura de Augusto Pinochet en el desierto de Atacama (norte de
Chile), será también distribuido en Canadá, México, Brasil y Argentina,
señaló Guzmán a Efe.
El estreno será seguido de una
retrospectiva de la obra de Guzmán, que podrá verse del 1 al 7 de abril
en el Bamcinématek, de la Academia de Música de Brooklyn (BAM).
El programa incluye los documentales “La batalla de Chile”, “Caso
Pinochet”, “La memoria obstinada”, “Isla de Robinson Crusoe”, “Madrid”,
“Salvador Allende” y también “Nostalgia de la luz”.
“El género
del documental se mueve en un mecanismo de crisis siempre. Yo estoy
acostumbrado”, dijo Guzmán en referencia a los problemas que enfrentó
para financiar “Nostalgia de la luz”, que tuvo un coste final de 600.000
euros (hoy 846.000 dólares).
“En este caso hubo más
dificultades porque me preguntaban si era una película filosófica, si
sería de mujeres que buscan a los muertos o sobre el desierto, porque no
entendían que se podía relacionar la vía láctea con el trabajo de las
mujeres (que buscan los restos de sus seres queridos), el pasado
milenario de las momias con el pasado de millones de años luz de los
astros”, señaló.
Tardo cuatro años y medio en hacer un guión y
durante ese tiempo, “no aparecía el dinero”, según recordó el cineasta,
que finalmente contó con el apoyo de Televisión Española (TVE), del
centro de Cinematografía Francés y una pequeña productora alemana.
Guzmán, de 69 años, opina que en América Latina ha habido “progresos importantes” en el campo político.
“Lo más que me gusta es que los pobres, los más desfavorecidos,
tienen más posibilidades. Podrás estar o no de acuerdo con un sistema,
pero es innegable que los pobres han logrado más cosas que nunca”,
argumentó