Denuncian alteración en informe de Conaf sobre HidroAysén
Las oficinas de Conaf de la región de Aysén están que arden. El equipo técnico y jurídico encargado de evaluar HidroAysén asegura que su informe de observaciones al proyecto habría sido modificado desde Santiago, a última hora y con el objeto de destrabar la tramitación ambiental, según lo investigado por la Radio Santa María de Coyhaique.
Las oficinas de Conaf de la región de Aysén están que arden. El equipo técnico y jurídico encargado de evaluar HidroAysén asegura que su informe de observaciones al proyecto habría sido modificado desde Santiago, a última hora y con el objeto de destrabar la tramitación ambiental, según lo investigado por la Radio Santa María de Coyhaique. Y el tema no es menor cuando se trata de un punto clave: la inundación de 18 hectáreas del Parque Nacional Laguna San Rafael.
En el último oficio de evaluación ambiental, con fecha 15 de noviembre, Conaf Aysén habría declarado que la intervención de esta zona no constituiría ilegalidad, dando pie a la posible autorización del Proyecto Hidroeléctrico HidroAysén.
Sin embargo, en las observaciones originales realizadas por el equipo evaluador, al cual tuvo acceso Radio Santa María de Coyhaique, se definió que “esta Corporación (Conaf) estima que mientras el Proyecto HidroAysén, pretenda realizar obras o inundar territorio que forma parte del Parque Nacional Laguna San Rafael y otra área de la misma categoría de protección, se está contraviniendo la legislación vigente”.
Esta observación, realizada por un grupo de al menos 12 profesionales pertenecientes a la oficina de la región de Aysén, habría sido pasada por alto por la Dirección Ejecutiva de Conaf, modificando la resolución y aceptando la inundación de una parte del área protegida. Esto, a pesar de que en las dos instancias anteriores, octubre de 2008 y noviembre de 2009, se había declarado inconforme frente al proyecto por varias razones, entre ellas la intervención de este lugar.
Lo que llama la atención es que la legislación ambiental chilena prohíbe cualquier intervención dentro de un parque nacional, como lo estipula la Convención de Washington ratificada por Chile en 1967, en su artículo tres donde dice que “las riquezas existentes en ellos no se explotarán con fines comerciales”. Sin embargo, en la última Adenda -informe donde la empresa responde a las observaciones de los servicios- presentada por HidroAysén, la empresa dice que el Convenio de Washington “no previó la situación de que una parte de un Parque Nacional u otra Área Protegida pudiese verse inundada”, y que “la inundación de 18 hectáreas del Parque Laguna de San Rafael no atentaría contra el espíritu de la Convención, ya que no afecta paisajes de incomparable belleza, formaciones geológicas extraordinarias u objetos naturales de interés científico o histórico ni causaría la extinción de las especies que ocupan la superficie a inundar…”.
José Oyarzo, presidente del Sindicato de Trabajadores de Conaf, afirmó a El Dínamo que la situación es una “vergüenza” y que le quita legitimidad al Sistema de Evaluación Ambiental. “Nosotros queremos denunciar que los trabajadores de Conaf no son los culpables del cambio de postura del servicio, sino que fueron las autoridades nacionales”, aseguró Oyarzo.
El Sindicato de Trabajadores de Conaf y el Sindicato de Profesionales esperan poder reunirse con el Director Regional, Juan Eduardo Barrientos, para aclarar la situación. Sin embargo, la junta puede posponerse hasta el lunes, a la espera de que todos los dirigentes estén presentes.