Young The Giant: el debut del año
Tras un complicado ascenso, esta banda finalmente nos deleita con su debut homónimo, donde entregaron desde guitarras punzantes hasta talento instrumental.
El camino que tuvo que recorrer esta novel banda de Irvine, California –llamada Young The Giant– para grabar su primera placa fue bastante accidentado. Cambios de integrantes, de nombres, suspensión de estudios, permisos parentales (dos de sus integrantes aún estaban en el colegio) y mucha incertidumbre acompañó a estos muchachos en su sueño de ser conocidos.
La perseverancia demostrada pagó sus créditos, porque el grupo ganó un concurso online en 2009 que les permitió telonear a una banda en pleno ascenso musical: Kings Of Leon. Luego de esa vitrina tan importante, fueron fichados para el Festival South By Southwest y ganaron rotación radial y televisa. Todo eso sin ni siquiera haber lanzado un EP.
A comienzos de este año, el conjunto entregó su primera obra de estudio –titulada homónimante– concitando de inmediato el interés de la prensa especializada. Su estilo ha sido definido desde el manoseado “indie” hasta el pop, pero la etiqueta da lo mismo, lo que importa es la música, y en ese terreno Young The Giant se mueve como un verdadero gigante.
Desde canciones como “Cough Syrup”, donde el ritmo se construye lentamente hasta desbocar en un coro de guitarras punzantes, hasta composiciones como “Garands”, donde se aprecia todo su talento instrumental -pasando por temas que exudan un aire veraniego como “12 Fingers” y “My Body”- este disco es un compendio de canciones enganchadoras y armónicas que sin duda alegrarán un poco el día.
Estos muchachos despacharon un notable primer disco, tal vez uno de los mejores debut del año con un rock urgente, con ritmos y melodías infecciosas que suenan como una revitalizadora bocanada de aire fresco.
En una escena musical donde predominan las canciones pop reciclables y reiterativas, esta banda demuestra que aún se puede hacer música de calidad.