Naviera Costa Cruceros indemnizará a los pasajeros del crucero siniestrado
La naviera cubriría los costos derivados de los pasajes y el resto de los gastos materiales. Además, la mujer que supuestamente acompañó a la capitán apareció defendiéndolo, similar postura manifiestan los habitante del pueblo de origen de Schettino .
La compañía naviera Costa Cruceros, propietaria del Costa Concordia, el crucero que naufragó el pasado viernes ante la isla italiana del Giglio, confirmó que se está poniendo en contacto con pasajeros y asociaciones de consumidores para “reembolsar los pasajes y el resto de gastos materiales”. Además, el presidente y consejero delegado de Costa Cruceros, Pier Luigi Foschi, ha enviado una carta a todos los pasajeros para defender la actuación de la naviera y de su tripulación.
Ante las críticas de algunos pasajeros por la ausencia de ayuda por parte de la tripulación, y sin citar en ningún momento al capitán Schettino, Foschi asegura que el personal “se ha comportado de manera admirable en una situación de dificultad extrema, consiguiendo, en las terribles condiciones en que se encontraban, evacuar a más de 4.000 personas en el menor tiempo posible”.
También indicó que “está previsto un ejercicio (de evacuación y salvamento) dentro de las primeras 24 horas sucesivas al día del embarque, tal y como prevé la ley“.
En la carta asegura que “existen disposición de chalecos salvavidas, lanchas y botes salvavidas en un número superior al máximo de las personas que puede acoger el barco”
Misteriosa mujer
En tanto, ya fue ubicada la joven que cenó con el capitán la noche de accidente y que estaba sentada en la sala adyacente al puente del mando del crucero, siguendo a través de los cristales de la ventana las maniobras del capitán Francesco Schettino.
Dominika Cermortan, apreció dando una entrevista a la televisión moldava, asegurando que era miembro de la tripulación y por lo tanto, podía estar con otros oficiales. La joven reconoció además que cenó con el capitán a las 21.45 horas locales, en el momento de la colisión contra las formaciones rocosas, que abrieron el casco a lo largo de 70 metros por lo que el buque comenzó a embarcar agua.
Sin embargo Cermortan defiende las acciones de Francesco Schettino al indicar que “salvó millares de personas. Creo que ha desarrollado un trabajo extraordinario, toda la tripulación es solidaria con él y piensa que ha salvado a más de 3.000 personas”, según han retransmitido los medios italianos.
Dominika logró alcanzar una barca de salvamento y, según dijo, ayudó a otras personas.”Me felicito por haber salvado gente”, refirió a los medios moldavos.
La Fiscalía de Grosseto, que investiga el accidente, busca interrogar a la joven moldava para recomponer las secuencias de lo sucedido en el puente de mando la noche del 13 al 14 de enero cuando se produjo el naufragio. Se debe aclarar asimismo en calidad de qué viajaba en el crucero, ya que no aparece ni en las listas de pasajeros ni en las de la tripulación.
Ya ha pasado el tiempo suficiente para que el test de alcohol a Schettino sea efectivo, pero cuando le sometieron a las pruebas toxicológicas, aseveró: “No fumo, no bebo, no me drogo”. Mientras, los investigadores ordenaban las búsqueda de la caja fuerte en el interior del buque siniestrado, por si hubiera rastro de cocaína.
El Gobierno italiano ya ha adelantado, desde ya, que va a prohibir la costumbre de los cruceros de saludar acercándose excesivamente a la costa
“Este tipo de acciones se realizan con finalidades publicitarias y resultan mucho más eficaces que un anuncio de publicidad, los saben los armadores y lo sabe la Capitanía”,señalan expertos de publicidad al diario “La Repubblica”.
Mientras tanto, el capitán del crucero llegó ayer a su pueblo, Meta di Sorrento (Campania), escoltado por los carabineros, allí fue recibido como un héroe por los habitantes, incluyendo a autoridades como el sacerdote. El fiscal va recurrir la decisión de la jueza porque “el capitán fue malo en la maniobra, en el abandono de la nave, al no haber dirigido las operaciones de rescate, al no haber dado ninguna orden. Creo que su comportamiento fue incalificable e impresentable”.