España: El número de cesantes llega a un máximo histórico con 5,3 millones
El balance es demoledor, desde finales de 2007 se han destruido 2,7 millones de empleos, el 55% en el sector de la construcción. Este fenómeno marca el inicio de una nueva recesión.
La mejor prueba de que ha empezado otra grave recesión ha sido confirmada por la publicación de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre de 2011. Tras cuatro años de crisis, sin atisbo de recuperación, el mercado laboral español sigue sumamente afectado, los datos hablan por su solos. Según la EPA, entre octubre y diciembre de 2011 se perdieron 348.000 puestos de trabajo y aumentó la cesantía en 295.300 personas respecto al tercer trimestre. El balance provisional de la crisis es demoledor: el desempleo alcanza ya a 5,3 millones de personas. Desde finales de 2007 se han destruido 2,7 millones de empleos, el 55% en el sector de la construcción.
Es la primera vez que se superan los cinco millones de parados en el mercado laboral español. En los últimos días, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y ayer mismo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, habían aventurado que se llegaría a 5,4 millones de parados al cierre de 2011. La cifra suministrada por el INE es menor (5.273.600 parados), pero, en parte, por razones muy poco tranquilizadoras.
La pésima situación laboral llevó a 53.400 personas a dejar de buscar trabajo en el cuarto trimestre. Solo en el verano de 2009 hubo una caída de la población activa mayor. Y en este caso, pesa mucho más el efecto desánimo entre los trabajadores españoles, que las salidas del mercado laboral de los trabajadores extranjeros.
Con estos datos, la tasa de paro se sitúa en el 22,85% de la población activa, 1,35 puntos porcentuales más que en el trimestre anterior. En la serie estadística permanece aún como máximo histórico el 24,5% alcanzado en 1994, aunque según un análisis del Banco de España, si la cesantía de aquel año se calculase con los criterios actuales equivaldría al 18,2%, otro indicador de la envergadura de esta crisis.
Es en la destrucción de empleo, la variable más seguida por los expertos, donde se hace notar el inicio de otra grave recesión, donde se vuelve a lo peor de esta grave crisis. La pérdida de puestos de trabajo ha superado los peores augurios: solo en el tramo final de 2008 y en el arranque de 2009, el semestre negro en el que el número de ocupados bajó en 1,2 millones de personas, hubo un descenso trimestral (348.000 menos) tan acusado.
Por comunidades, Andalucía y Canarias (con tasas de paro por encima del 30%) y Navarra y el País Vasco (menos del 14%) marcan los extremos del mercado laboral. En el cuarto trimestre, la Comunidad de Madrid ( 50.300 parados más) y Baleares (71.000 empleos menos) se llevaron la peor parte.