Cumbre Económica en Bruselas: La UE se la juega por potenciar la disciplina fiscal
Los líderes de 25 naciones de la Eurozona firmaron un tratado de disciplina presupuestaria y la consolidación fiscal. La estrategia apunta a combinar la austeridad con políticas a favor del crecimiento.
Los jefes de Estado y Gobierno de la Unión Europea (UE) han reanudado hoy la cumbre en Bruselas en la que han dado un nuevo espaldarazo al compromiso con la disciplina fiscal, pero en la que también quieren dejar claro que la austeridad debe combinarse con las políticas a favor del crecimiento.
Antes del inicio de la segunda jornada del Consejo Europeo, los líderes de todos los países miembros, a excepción del Reino Unido y la República Checa, han firmado el pacto para la disciplina presupuestaria y la consolidación fiscal.
A su llegada a la cumbre, la presidenta lituana, Dalia Grybauskaité, aseguró que “por primera vez en dos años estamos hablando de crecimiento y del futuro de nuestra economía, y no sólo de la gestión de la crisis”, y agregó que “la confianza de los mercados no se puede ganar inmediatamente en una noche”.
“Los esfuerzos de las autoridades griegas son ya impresionantes, y tenemos esperanza en que sigan así. Europa los está respaldando e intentaremos ayudarles”, apuntó.
En esa línea, el primer ministro finlandés, Jyrki Katainen, destacó que ésta es “la primera cumbre ‘normal’ en dos años, estoy muy satisfecho”.
“Ha habido diferentes caminos en esta crisis, el primero, encontrar el mecanismo para afrontarla; entonces, los países empezaron a tomar medidas de austeridad, y, ahora, hemos llegado al momento en que tenemos que fortalecer nuestro mercado interior, reforzar las debilidades estructurales de cada Estado miembro”, argumentó.
Por lo que respecta a Grecia, apuntó que “no tenemos un ‘plan B’ porque hemos elegido la manera de gestionar la crisis, y ahora Grecia tiene que hacer lo que tiene que hacer. Primero, medidas de austeridad, y luego la confianza le seguirá”.
“No está terminado totalmente el problema griego”, advirtió no obstante la primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, aunque reconoció que “se han dado pasos sustanciales en la buena dirección”.
Por último, los jefes de Estado y de Gobierno de la UE concluirán la reunión con un debate sobre el agravamiento de la situación en Siria, y encargarán el estudio de nuevas medidas restrictivas para seguir estrangulando económicamente el régimen de Bachar Al Asad.