Cuando se lleva el ring de box… a la cama
Solucionar los problemas de pareja bajo las sábanas no es la mejor solución ni el broche de oro para algo que no funciona.
Solucionar los problemas de pareja bajo las sábanas no es la mejor solución ni el broche de oro para algo que no funciona. Según los expertos, atribuirle al sexo poderes sanatorios que no posee llega a ser peligroso. Antes de llevar a la relación hacia fisuras, resentimientos y diferencias irreconciliables, hay que conocer los síntomas.
El sexo no es una solución
No hay que atribuir al sexo poderes que no posee. Pensar que el sexo es el remedio para las peleas es un grave y monumental error.
A la cama no debe llegarse con resentimientos o cosas que indignan. Cuando esto sucede, el ring de box pasa de la sala o el comedor al lecho conyugal y, como consecuencia, se producen situaciones atípicas y nada gratificantes en el acto amoroso.
Esa satisfacción que se siente momentáneamente, es una ilusión y una ilusión que puede desembocar en un conflicto mucho mayor en el futuro, ya que lo no dicho…