Hermanos Parisi en problemas: Dejarán administración de colegios tras denuncias de apoderados
Antonino Parisi señaló que todo responde a presiones políticas contra su hermano Franco “en su postulación presidencial”, mientras que los padres aseguran que en uno de los establecimientos hay grave déficit financiero y no pago de sueldos a los docentes.
A casi un año y medio de asumir la administración del 70% de las acciones de los colegios La Fontaine (de Ñuñoa) y Las Américas (La Reina) a través de la sociedad Palermo, los economistas Antonino y Franco Parisi fueron denunciados por los apoderados de desórdenes administrativos, despido de profesores, intervención en el centro de padres y hasta discriminación contra una alumna por ser hija de una dirigenta de los apoderados.
Según publicó La Segunda, la situación se la habrían informado a los propios Parisi y a la Gran Logia, quien tenía acargo ambos establecimientos, reclamando que nunca se les consultó a la comunidad educativa sobre el cambio de administración..
La secretaria del centro de padres y apoderados de La Fontaine, Marcela Campos, detalló que “no se han pagado cotizaciones previsionales de los profesores, hay deudas con cajas de compensación, atraso en el pago de los sueldos, falta de materiales para el trabajo pedagógico, y, lo que es peor, el proyecto educativo por el que nosotros optamos para entregar a nuestros hijos se ha deteriorado: no discutimos la educación de nuestros hijos como un bien de consumo, acá estamos por opción por los valores masónicos que se trataron de inculcar, pero con la nueva administración eso se perdió”
Los apoderados agregaron que inlcuso hay un caso que está en la justicia, como el de la ex presidenta del centro de padres que acusa que su hija fue expulsada por quedar repitiendo.“Esto es discriminación, pues el colegio no puede sacarla sólo por repetir el año”, indicó Campos.
El mayor de los hermanos, Antonino Parisi, aseguró que esta situación responde a presiones políticas “para afectar a mi hermano Franco en su postulación presidencial —cuando se trata de un emprendimiento mío— y también presiones de apoderados que tratan de evitar el compromiso de pago de sus obligaciones con el colegio”.
El economista confirmó que él y su hermano renunciaron al directorio del establecimiento y que la mañana de este jueves, tras una reunión con la Gran Logia, acordaron terminar el contrato para que La Fontaine y Las Américas vuelvan a manos de la masonería.
“Este es un colegio deficitario, gasta más que lo que ingresa, porque hay muchos apoderados que no pagan sus mensualidades, los sueldos son muy altos en comparación con la productividad e incluso hemos tenido que pagar gratificaciones por utilidades que son de 2009 de hasta $15 millones, cuando ni siquiera habíamos pensado en llegar al colegio”, señaló Parisi.
Una afirmación que es contradecida por los apoderados. Según Marcela Campos, “antes de que llegaran los Parisi este colegio estaba con números azules. Pero ahora todo lo destinan a Las Américas”.
